Actualizado 19/09/2018 08:48

Las tribus aisladas en Brasil se encuentran en peligro ante el aumento "preocupante" de la deforestación

Deforestación del Amazonas
GETTY - Archivo

RÍO DE JANEIRO, 19 Sep. (Reuters/EP) -

Los madereros y las milicias ilegales han deforestado este año una zona tres veces mayor al tamaño de Gibraltar en la Amazonia brasileña, amenazando a una tribu indígena aislada, según han informado este martes activistas.

Las imágenes satélite recogidas por el Instituto Socioambiental (ISA), un grupo de defensa brasileño, han detectado cerca de 1.863 hectáreas de deforestación este año en la tierra indígena de Ituna Itata en el estado de Pará, en el norte de Brasil.

"Esta situación es muy preocupante", ha afirmado Juan Doblas, analista de geoprocesamiento de ISA, a la Fundación Thomson Reuters. "Existe una serie de riesgos, no solo para los territorios indígenas de las tribus aisladas, sino también para otros territorios indígenas de la zona", ha aseverado.

La agencia de protección ambiental Ibama ha señalado en un comunicado que los datos oficiales sobre la deforestación en la Amazonia serán publicados en noviembre.

Las tribus aisladas de Brasil, algunas de las últimas del planeta, dependen de grandes extensiones de bosques intactos para cazar animales y recolectar los alimentos que necesitan para sobrevivir.

Son particularmente vulnerables cuando sus derechos a la tierra se ven amenazados porque carecen de la inmunidad natural a las enfermedades que son transportadas por personas del exterior, según grupos defensores de derechos.

La pérdida de bosques en Ituna Itata, donde la entrada de forasteros fue prohibida en 2011 para proteger a la tribu aislada, aumentó en 809 hectáreas en agosto de las dos hectáreas en mayo, según ha informado ISA, que ha controlado la zona a través de satélites desde enero.

El país más grande de Sudamérica está lidiando con decenas de conflictos mortales sobre tierras, lo que muestra las tensiones entre la preservación de la cultura indígena y el desarrollo económico.

ISA presentó una denuncia en abril a las autoridades federales y estatales sobre la destrucción de bosques y la tala ilegal en la zona durante la temporada de lluvias, lo que es algo inusual, según Doblas. "Fue una señal de que algo muy grave iba a suceder", ha señalado. "Fue una preparación para la invasión", ha añadido.

La agencia de protección ambiental Ibama respondió enviando patrullas en mayo, lo que detuvo temporalmente la tala, según Doblas, que ha añadido que ISA pretende presentar otra denuncia esta semana, utilizando datos actualizados e imágenes satélite.