SAO PAULO, 16 Mar. (Notimérica) -
Detenido en España, el brasileño Kaique Luan Ribeiro Guimarães de 18 años ha sido acusado de intentar asociarse al grupo terrorista Estado Islámico, aunque ha negado cualquier vínculo con la célula del grupo en España, donde reside desde 2006 con su familia.
En el programa Fantástico de TV Globo de este domingo, la madre de Guimarães, Amaurinda Ribeiro, dijo que creía en la inocencia de su hijo, un joven que se convirtió al islamismo y que fue preso en diciembre de 2014 en Bulgaria junto con dos amigos marroquíes. De acuerdo con las autoridades españolas, los tres planeaban viajar juntos desde Bulgaria a Turquía, para ir después hasta Siria por vía terrestre para unirse al Estado Islámico.
Luan Ribeiro se encuentra detenido actualmente en una prisión de León, ciudad localizada en el noroeste de España, no tiene derecho a fianza y su caso está siendo investigado bajo secreto judicial.
En una entrevista en el programa Fantástico, la madre del brasileño, que también vive en España, contó que el joven le había dicho que viajaría a la isla española de Mallorca y no a Bulgaria. "Él mintió. Él dice que iba a Mallorca porque, claro, si decía que iba a Turquía, yo no le iba a dejar".
A pesar de haber mentido sobre el destino del viaje en diciembre con los dos amigos marroquíes, Amaurinda ha dicho que él niega cualquier relación con el Estado Islámico.
"El día de la visita que estuve aquí la otra vez él me dijo "mamá, yo no he hecho nada. El único crimen que cometí fue convertirme a musulmán y viajar sin pedirte permiso, sin decirte que iba a viajar", ha señalado la madre del acusado.
Durante la visita realizada al joven en la prisión de León, Amaurinda le llevó al joven algunas preguntas hechas por el programa brasileño, las cuales el joven respondió confirmando que "nunca tuvo contacto con nadie de esa organización, ni en las redes sociales y, mucho menos, personalmente".
Por su parte, la Policía española ha contradicho las palabras del brasileño y ha señalado que éste estaba siendo monitorizado desde hacía siete meses. En su última visita al joven, Amaurinda había recibido un documento del Gobierno de España que afirma que él era sospechoso de pertenecer a una red de captación, radicalización y envío de personas a lugares donde actúan organizaciones terroristas yihadistas con el objetivo de cometer actos terroristas.
Como acusado, Guimarães tiene un defensor público, pero su madre dice que tiene mucha dificultad para contratar sus servicios y por eso espera conseguir un nuevo abogado particular para defender al joven.