Actualizado 23/07/2009 03:29

Caminata espacial termina antes por problema en traje astronauta

Por Irene Klotz

CABO CANAVERAL, EEUU (Reuters/EP) - La NASA finalizó anticipadamente el miércoles una caminata fuera de la Estación Espacial Internacional, después de que uno de los trajes espaciales de los astronautas comenzara a acumular dióxido de carbono, informaron funcionarios.

La caminata, realizada por el experimentado astronauta del transbordador David Wolf y por el novato Chris Cassidy, fue suspendida poco antes de las 2000 GMT, cuando los astronautas se encontraban reemplazando baterías en el sistema de energía solar de la estación.

Ambos habían logrado instalar dos de las cuatro baterías cuando el Control de la Misión indicó a la tripulación que regresara a la cámara de aire. Llevaban cerca de seis horas en el espacio cuando el traje de Cassidy empezó a presentar problemas.

Los sensores advirtieron una acumulación de dióxido de carbono. El gas, que es un subrproducto de la respiración, generalmente es removido químicamente por un filtro de hidróxido de litio.

"Parece que el filtro en sí mismo está experimentando problemas", dijo por radio Aki Hoshide a la tripulación del Endeavour desde el Control de la Misión en Houston.

"No es una falla inminente", agregó Hoshide. "Sólo queríamos asegurarnos de que ustedes estuvieran de vuelta en la cámara de aire", agregó.

La salida era la tercera de cinco previstas durante la misión de ensamblaje de la Estación Espacial Internacional por parte del transbordador Endeavour.

Las pruebas realizadas el miércoles al tanque de combustible destinado para el próximo lanzamiento espacial de la NASA en agosto no arrojaron problemas en la forma en que la espuma aislante está adherida al tanque, dijo el miércoles una portavoz de la agencia.

El resultado de las pruebas, ordenadas por la NASA después de que cayera una inusual cantidad de fragmentos de espuma del transbordador Endeavour durante su lanzamiento la semana pasada, podría eliminar un obstáculo para el próximo lanzamiento.

La NASA se ha vuelto muy exigente respecto a la caída de deshechos en vuelo desde que el transbordador Columbia estalló en el 2003 cuando reingresaba a la atmósfera.

Un trozo de espuma que cayó del tanque de Columbia durante el lanzamiento impactó el ala de la nave causando daño en un panel de protección contra el calor. Deciséis días más tarde, el transbordador estalló durante el reingreso a la atmósfera causando la muerte de los siete astronautas que transportaba.

Sin embargo, la caída de espuma del Endeavour el 15 de julio ocurrió a una mayor altura, por lo que no hubo suficiente fuerza atmosférica para que los deshechos golpearan la nave y causaran daño.