Actualizado 13/06/2014 21:52

Las autoridades canadienses no podrán pedir información de los usuarios de Internet

Cable de internet y portátil
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OTAWA, 13 Jun. (Reuters/EP) -

El Tribunal Supremo de Canadá ha dictaminado este viernes que las autoridades no pueden solicitar nombres de clientes o cualquier otra información personal de manera legal a los proveedores de Internet sin una orden judicial. Una victoria para el anonimato en la red que obstaculiza el trabajo de la Policía.

El Tribunal acabó con el anonimato con su sentencia en el caso de Matthew David Spencer, acusado de posesión de pornografía infantil por el tribunal provincial de Saskatchewan. Según las autoridades judiciales, la Policía consiguió dar con la actividad de Spencer a través de los datos privados que obtuvieron de la base de datos IP de la compañía de cable Shaw Communications Inc, accesible públicamente.

La legislación canadiense confiere una razonable protección de seguridad a los internautas, que fue violada por la petición de la Policía. La información que los agentes obtuvieron de Shaw conectaba las direcciones de IP con la Spencer y revelaba datos sobre su actividad 'online'. El acusado accedía a Internet desde una cuenta registrada a nombre de su hermana, pero utilizaba su propio ordenador para almacenar cientos de imágenes y vídeos de niños sexualmente explícitos.

Las autoridades judiciales han explicado que la Policía, con un nombre y una dirección vinculadas a la cuenta, era capaz de detallar las búsquedas y comportamiento de Spencer en la red, lo que acababa con su anonimato y protección. El Tribunal ha detallado que ni siquiera con la información obtenida de esta búsqueda, la Policía obtendría una orden para el registro físico de la propiedad de Spencer.

Por otro lado, la sentencia sostiene que en este caso específico la Policía ha actuado de buena fe, por lo que las pruebas de la Policía podrían ser admitidas en un nuevo juicio contra Spencer como acusación por tenencia y elaboración de imágenes pornográficas y vídeos disponibles públicamente a través de programas para compartir archivos.

Aunque las condiciones de servicio de Shaw permiten a la compañía revelar información bajo requerimiento legal, Shaw también debe atenerse a las leyes de privacidad que requieren el conocimiento de los clientes o el consentimiento, excepto en circunstancias excepcionales, según ha dictado el Tribunal.