Actualizado 23/09/2009 13:32

Castro cree "valiente" a Obama por admitir que los países desarrollados tienen más culpa del cambio climático

Considera "aspectos positivos" la reforma sanitaria y su preocupación por el cambio climático, pero critica sus bases militares de EEUU

LA HABANA, 23 Sep. (EUROPA PRESS) -

El ex presidente cubano Fidel Castro calificó esta martes de "valiente" al presidente, Barack Obama, por reconocer ayer que los países desarrollados tienen más culpa en el avance del calentamiento global que los países en vías de desarrollo, aunque criticó que esta defensa está en "contradicción" con el modelo económico exportado desde Washington.

"El Presidente de Estados Unidos admitió que las naciones desarrolladas han causado la mayor parte del daño y deben asumir la responsabilidad. Fue sin dudas un gesto valiente. Sería justo reconocer también que ningún otro Presidente de Estados Unidos habría tenido el valor de decir lo que él dijo", aseguró Castro en sus reflexiones publicadas este miércoles en 'Cuba Debate', tituladas 'El Obama serio'.

Castro criticó sin embargo las declaraciones que pronunció Obama a favor de la lucha contra el calentamiento global durante la reunión de alto nivel sobre cambio climático auspiciadas este martes por la ONU en Nueva York al considerar que ésta en "contradicción" con el modelo capitalista impulsado por Estados Unidos desde la Segunda Guerra Mundial hasta convertirlo en "el amo de la economía mundial".

"El problema ahora es que todo lo que afirma (Obama) está en contradicción con lo que Estados Unidos viene haciendo desde los últimos 150 años, particularmente desde que, al finalizar la Segunda Guerra Mundial, impuso al mundo el acuerdo de Bretton Woods y se convirtió en amo de la economía mundial", aseguró el artífice de la Revolución cubana en sus reflexiones.

Obama defendió ayer la urgencia de actuar contra el cambio climático, algo que depende, dijo, "de un compromiso global" para atajar los efectos del calentamiento global pese a reconocer que "las naciones desarrolladas han causado la mayor parte del daño y deben asumir su responsabilidad".

"Tenemos la responsabilidad de proveer ayuda financiera y técnica" a los países en vías de desarrollo, aseguró Obama, al tiempo que defendió que cada país "debe hacer su parte para que nuestras economías crezcan sin poner en peligro el planeta".

Sin embargo, Castro consideró que "áún cuando se reduzcan los gases contaminantes en los países industrializados, lo que sería loable, no es menos cierto que 5 mil 200 millones de habitantes del planeta Tierra, es decir, las tres cuartas partes de la población, viven en los países que en mayor o menor grado están por desarrollar, los cuales demandarán enormes consumos de carbón, petróleo, gas natural y otros recursos no renovables que, de acuerdo con patrones de consumo creados por la economía capitalista, son incompatibles con el objetivo de salvar la especie humana".

Aunque Castro reconoció que "no sería justo culpar al Obama serio del mencionado enigma por lo ocurrido hasta hoy" pero subrayó que "sería menos justo todavía que el otro Obama nos hiciera creer que la humanidad pueda preservarse bajo las normas que hoy prevalecen en la economía mundial".

Asimismo, Castro elogió a Obama por la reforma sanitaria que trata de impulsar en Estados Unidos para "llevar la salud a 47 millones de norteamericanos que carecen de ella", así como su "preocupación por el cambio climático", "dos aspectos positivos de su conducta", pero criticó que sus bases militares repartidas por el mundo y el comercio de armas que impulsa Washington "son incompatibles con el objetivo de salvar la especie humana".