Actualizado 08/03/2010 19:19

Chile.- El Gobierno advierte de que el frío y las lluvias podrían agravar la situación de emergencia en Chile


CONCEPCIÓN/CONSTITUCIÓN (CHILE), 8 Mar. (Reuters/EP) -

El Gobierno de Michelle Bachelet advirtió este lunes de que el incipiente frío y primeras las lluvias en el sur de Chile podrían agravar la crítica situación por la que atraviesan las miles de personas que se quedaron sin hogar tras el terremoto de 8,8 grados que sacudió hace una semana la zona centro-sur de ese país.

Tras nueve días desde el potente seísmo, las fuertes réplicas siguen sacudiendo al país, con una docena de sismos de mediana magnitud en las últimas horas que siguen causando pánico entre la población.

Suaves lloviznas han caído este domingo y parte del lunes en algunas zonas del sur, en la antesala del próximo invierno austral que, sumado a bajas temperaturas, complicaría la precaria situación de miles de personas en pueblos derrumbados por el temblor o borrados del mapa tras las gigantes olas.

"Llovió anoche y la gente está buscando náilon y latas para forrar las carpas. Todos tenemos miedo a eso, a que empiece a llover. Mucha gente está buscando techos, latas, maderas para hacer una casita y acogernos de la lluvia", dijo Ana Silva, de 40 anos, quien perdió su casa en el pueblo costero de Dichato.

El Gobierno no ha divulgado la cifra exacta de personas durmiendo en las calles o en improvisados albergues, pero el ministro del Interior, Edmundo Pérez Yoma, explicó que ya fueron enviadas 5.000 carpas a la zona afectada para dar refugio a 30.000 personas.

"La extrema urgencia ya pasó. Todavía nos queda la emergencia. Tenemos que ir en ayuda de aquellos que han perdido sus casas, que están amenazados ahora por la posibilidad del mal clima", afirmó Pérez Yoma a la radio local Cooperativa.

El potente seísmo y el tsunami siguiente, en el peor desastre natural de Chile en medio siglo, han dejado al menos 452 muertos identificados y una cantidad imprecisa de desaparecidos.

El Gobierno estimó que podría tomar de tres a cuatro años en reconstruir el país, mientras analistas han cifrado los daños en hasta 30.000 millones de dólares (unos 22.210 millones de euros). El país baraja solicitar créditos o financiamiento de organismos internacionales.

"Este (por el mal clima) es el problema grave que se nos viene encima (...) Estamos habilitando albergues. Hemos enviado una cantidad significativa de carpas. Hay mucha gente que en Chile hace camping, que a lo mejor esta vez podrían donar sus carpas", pidió Pérez Yoma.

En Constitución, una ciudad costera arrasada por las olas, las autoridades y la fundación privada Un techo para Chile aceleraron la construcción de viviendas de emergencias tras las ráfagas de lluvia que cayeron la noche del domingo y madrugada del lunes.

REMEZÓN ECONÓMICO

La mandataria chilena, Michelle Bachelet, quien entregará el poder este jueves al presidente electo, Sebastián Piñera, tiene previsto volver a visitar este lunes Constitución.

Bachelet, que antes del terremoto gozaba de un 83 por ciento de aprobación, ha visto manchado su legado ante críticas por su lenta respuesta en brindar ayuda y en detener saqueos después del devastador terremoto.

"Estoy decepcionada con el Gobierno y con Bachelet. El Gobierno reaccionó realmente mal", dijo Blanca Jara, de 33 años, quien trabaja en una escuela para niños discapacitados en la ciudad de Concepción, una de las ciudades más afectadas por el seísmo.

El Ministerio de Salud estimó en 3.600 millones de dólares (2.643 millones de euros) el costo de reconstrucción de los hospitales dañados; mientras que la reparación de la infraestructura vial demandaría 1.200 millones de dólares (881 millones de euros), según la cartera de Obras Públicas.

Chile registró este lunes datos de inflación y balanza comercial en febrero que mostraron una economía que se recuperaba con fuerza antes del terremoto. Según economistas, esta recuperación podría desacelerarse por el seísmo, pero volvería a repuntar en el segundo semestre.

El terremoto sorprendió al país en plena trayectoria de recuperación después de la recesión del año pasado, la primera en una década, debido a la crisis global.

El Gobierno informó este lunes de que el índice de precios al consumo creció un 0,3 por ciento en febrero, pero en marzo saltaría al 0,7-0,8 por ciento, según pronósticos de analistas, dada las presiones por el lado de la demanda por un aumento en el precio de los alimentos por los problemas de producción y transporte.

En una entrevista con Reuters en Basilea, el presidente del Banco Central, José De Gregorio, dijo este domingo que la economía chilena está en una buena posición para lograr una fuerte recuperación tras el terremoto, y afirmó que aún podría crecer entre un 4,5 y un 5,5 por ciento este año.