Actualizado 08/12/2010 18:36

Chile.- Piñera califica de "inhumano" el sistema carcelario de Chile y lamenta la muerte de 83 presos en Santiago


SANTIAGO, 8 Dic. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Chile, Sebastián Piñera, calificó este miércoles de "absolutamente inhumano" el sistema carcelario de ese país, al confirmar la muerte de 83 reclusos de la prisión de San Miguel, en Santiago, a consecuencia de un incendio producto de una riña.

Piñera lamentó la "tremenda y dolorosa tragedia" ocurrida en ese penal, del que tuvieron que ser evacuados más de 200 reos debido a la magnitud del siniestro. Una veintena de personas se encuentra gravemente herida.

"La cifra (de víctimas) podría aumentar, porque hay heridos de gravedad. Esperamos que ésto no ocurra, pero no podemos garantizar que el número de muertos no aumente", expresó el mandatario chileno que suspendió sus actividades para atender esta emergencia.

Tras evaluar la situación con ministros y senadores, Piñera advirtió de que "la situación penitenciaria" en Chile "no resiste más". El pasado 15 de octubre el Gobierno puso en marcha un "completo plan para modernizar" la estructura carcelaria que prevé la construcción de tres prisiones y el desarrollo de planes para mejorar las condiciones de los reclusos.

La población penitenciaria de Chile es de unos 108.000 internos, pero la mayoría viven hacinados en edificaciones que están en condiciones precarias. Piñera afirmó que el sistema carcelario "no solamente es inhumano" sino que además "es un atentado a la calidad de vida y a la dignidad de todo el país".

El problema de las prisiones en esa nación sudamericana es algo que "se arrastra ya desde hace mucho, mucho tiempo", acotó el mandatario, quien considera que la "tragedia" de los 83 reclusos en Santiago debe "ayudar a corregir el rumbo" en esa materia.

INCENDIO

El incendio comenzó cerca de las 5.30 horas (9.30 horas en la España peninsular), en el tercer piso de la torre cinco de la penitenciaría de San Miguel, debido, al parecer, a una pelea entre internos que quemaron colchones.

Según los medios locales, los reos fueron quienes alertaron de la propagación de los llamas a través de sus teléfonos móviles, a pesar de que en las cárceles chilenas está prohibido que los internos dispongan de estos aparatos.

Aunque todavía se desconocen las causas de este hecho, las autoridades locales no descartan que se haya tratado de una reyerta. en ese penal que alberga 1.900 reclusos, pese a que la infraestructura tiene una capacidad para alojar a 700 presos.