CIUDAD DE PANAMA, 6 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Programa Mundial de Alimentos (PAM) de las Naciones Unidas ha hecho llegar por vía aérea un envío de asistencia alimentaria de emergencia a la población costera de Bilwi (anteriormente conocida como Puerto Cabezas), en Nicaragua, para distribuirlas entre los damnificados que sufrieron los estragos causados por el huracán Félix el pasado martes.
Estimaciones preliminares del PAM indican que unas 60.000 personas fueron directamente afectadas en la región costera norte en donde los fuertes vientos destruyeron o causaron daños a casas y edificios comerciales. A pesar de éstos, los funcionarios de ayuda humanitaria mostraron su alivio porque el huracán Félix no causara mayores destrozos durante su paso por Nicaragua, Honduras y El Salvador.
"El huracán Félix tenía el potencial de causar gran devastación y sufrimiento a millones de personas", dijo la Directora Ejecutiva Adjunta del PAM, Górdana Jerger. "Somos sumamente afortunados. Sin embargo, hay trabajo urgente por hacer para ayudar a los que fueron afectados y necesitaremos asistencia financiera inmediata de nuestros donantes", añadió.
El envío vía aérea consistió en 4,5 toneladas métricas de frijoles, arroz, una mezcla fortificada de maíz y soya, y aceite de cocinartransportados por un avión de la Fuerza Aérea de Nicaragua. Con este primer envío se pueden alimentar a casi 900 personas por 10 días. El transporte por tierra está paralizado después de que un puente fuera arrasado por la crecida de un río.
"Sólo podemos enviar asistencia a las zonas afectadas por aire, mar o por río", dijo el representante del PAM en Nicaragua, William Hart. Este cargamento es la segunda distribución de emergencia de alimentos en la región costera atlántica tras el paso del huracán Félix el martes pasado. Otras 70 toneladas fueron distribuidas el martes en Bilwi y Waspam.
También ese mismo martes, en Honduras, personal del PAM en Tegucigalpa, la capital de Honduras, distribuyó alimentos a miles de personas que se refugiaron en los albergues temporales. Mientras tanto, en El Salvador, el PAM está aún evaluando los daños causados por Félix en las zonas geográficas vulnerables.
"Debido a que el PAM tiene alimentos almacenados en depósitos para sus proyectos a largo plazo en la zona, pudimos responder con una rapidez inusual", dijo Jerger. "Necesitaremos el apoyo internacional para nuestra operación en Nicaragua no sólo para reabastecer los depósitos sino asistir a los damnificados que necesitarán ayudar a corto y largo plazo para reconstruir sus vidas en próximos meses".