Publicado 08/01/2018 15:02

Comunidades indígenas de Perú restauran antiguas presas para mejorar el acceso al agua y salvar su ganado

COMUNIDADES INDÍGENAS
REUTERS

   ROMA, 8 Ene. (Thomson Reuters Foundation/EP/Notimérica) -

   Las comunidades indígenas de los pueblos de Canchayllo y Miraflores, en los Andes centrales de Perú, han restaurado con éxito presas abandonadas, embalses y canales de hace más de 3.000 años con el fin de mejorar el acceso al agua y salvar su ganado, en peligro debido a las precipitaciones irregulares y la retirada de los glaciares.

   Tras dos años desde la finalización del proyecto, respaldado por The Mountain Institute (TMI), una organización sin ánimo de lucro con sede en Estados Unidos, hay más y mejores pastos para ovejas y vacas, una mayor producción de leche y carne y un aumento significativo de los cultivos.

   "Las cordilleras occidentales de los Andes -con una marcada estación seca- cuentan con restos de antiguas infraestructuras dedicadas al manejo del agua", ha dicho el director del programa del TMI, Jorge Recharte. Los glaciares de Perú son una fuente de agua para millones de personas que están sufriendo una disminución progresiva, desde los años 70, del cuarenta por ciento, según los informes del Gobierno, ha explicado Recharte.

   El éxito del proyecto, que ha beneficiado a 9.600 personas de la Reserva Paisajística Nor Yauyos Cochas, ha aumentado la esperanza de miles de comunidades de la montaña peruana y de otros lugares que se enfrentan a presiones climáticas similares, ha dicho el supervisor del proyecto del TMI, Florencia Zapata.

   "El agua de la que depende la mayoría de la población proviene principalmente de las montañas", ha dicho Zapata, quien ha subrayado que "por lo tanto", hay que "cuidarla".

INFRAESTRUCTURA "GRIS Y VERDE"

   La restauración ha combinado tecnologías antiguas y modernas para satisfacer las demandas de los pastores. Los sistemas restaurados incorporan una infraestructura "gris" con tuberías de PVC, válvulas de agua y vallas y elementos "verdes" como la restauración de pastizales y humedales. El proyecto ha minimizado la necesidad de realizar trabajos de mantenimiento regulares ya que la mano de obra escasea.

   "No es suficiente mejorar solo la infraestructura o la disponibilidad de agua, ha dicho Zapata. "Si las personas no están organizadas para administrar la infraestructura, colapsará tarde o temprano", ha advertido.

   "Las personas más vulnerables a los efectos del cambio climático son las más pobres, menos educadas, más marginales e indígenas", ha dicho un experto peruano en el pastoreo en grandes altitudes, Julio Postigo, quien ha asegurado que "debemos luchar contra la pobreza y mejorar las condiciones de vida para que esas poblaciones se encuentren en mejores condiciones para responder al cambio climático".

   En Perú se encuentran el 70 por ciento de los glaciares tropicales del mundo, que son "especialmente sensibles a las temperaturas cálidas", según advirtió Naciones Unidas. "Aprender del pasado es absolutamente crucial para una agricultura productiva sostenible", ha declarado Alexander Herrera, un arqueólogo y profesor asociado de la Universidad de los Andes de Colombia involucrado en los proyectos de Canchayllo y Miraflores.