Actualizado 24/03/2010 20:52

Desarrollo.- El director de UNICEF en América Latina advierte de la "urgencia" de trabajar por los ODM en la región

Caroline Harper, de Overseas Development Institute, apuesta por inversiones sociales en época de crisis económica


MADRID, 24 Mar. (EUROPA PRESS) -

El director de la Oficina Regional de la Agencia de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) en América Latina y el Caribe, Bernt Aasen, destacó este miércoles la "urgencia" de incrementar los esfuerzos en el hemisferio occidental para avanzar en el cumplimiento de los Objetivos del Desarrollo del Milenio (ODM), para lo que debe primar un "sentido de responsabilidad compartida".

Durante una jornada en la Casa de América de Madrid sobre 'Infancia y Objetivos del Milenio: propuestas y retos para la cooperación internacional', varios expertos internacionales repasaron los retos actuales en materia de atención a la población y especialmente a los niños.

Al acto asistieron, entre otros, el jefe del Departamento de Cooperación Multilateral de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), José Moisés Martín, y la presidenta de UNICEF en España, Consuelo Crespo, que considera "enormes" los retos sociales con la actual crisis financiera internacional. En este contexto, añadió, el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación español mantiene un compromiso "destacado" con los ODM.

Aasen repasó las metas fijadas de desarrollo fijadas por la ONU en el año 2000 y destacó que persisten "grandes desafíos" en esta materia. En este sentido, incidió en la necesidad de "invertir" en la infancia, especialmente en época de crisis. La atención de los niños, subrayó, supone una forma de mejorar la economía a medio plazo y favorece un "desarrollo cohesionado".

Apeló a un "sentido de la responsabilidad compartida" para resaltar que los problemas acuciantes en cada país "pertenecen a todos los ciudadanos del mundo".

"Queda mucho por hacer", señaló el representante de UNICEF durante su intervención, en la que recordó que de los 20 países con mayores desigualdades del mundo, 14 se encuentran en la zona de América Latina y el Caribe.

No obstante, Aasen insistió en el peligro que supone referirse sólo a datos a nivel nacional a la hora de analizar la situación global de un país, ya que no existe la "hipotética persona promedio" a la que aluden las estadísticas. Este tipo de análisis, según apuntó, puede llegar a generar "brechas", por lo que siempre se debe tener presente que los ODM deben ser alcanzados por "todos" los ciudadanos.

ODM INCUMPLIDOS

El máximo representante de UNICEF en América Latina y el Caribe repasó los ODM para recordar lo lejos que se está su cumplimiento en la mayoría de los casos, como ocurre con la erradicación de la pobreza extrema y el hambre, ya que "en la región donde vivía el hombre más rico del mundo (en 2008) existían 180 millones de personas pobres".

Señaló que "estamos muy lejos" de la meta de reducir la pobreza en un 50 por ciento para 2015, especialmente en países como Guatemala, y recordó que en el caso de Haití, incluso antes del terremoto del pasado 12 de enero, uno de cada cuatro niños menores de cuatro años sufría desnutrición crónica.

Respecto al interés por lograr la enseñanza primaria universal, Aasen señaló que "la educación es un derecho y una condición para el desarrollo" y aplaudió que, en la mayoría de los países iberoamericanos, los avances son notables --el número de estudiantes que alcanzan el último grado de enseñanza primaria ronda el 80 por ciento--.

No obstante, existen excepciones, como son los casos de República Dominicana, Nicaragua o Guatemala. En este último país, además, pese a que un niño hispanohablante permanece de media escolarizado 6,7 años, para un indígena quechua el promedio baja a 1,8 años.

En materia de igualdad entre géneros, Aasen señaló que se ha generalizado una tendencia por la cual las niñas permanecen más tiempo en la escuela que los niños, excepto en países como Bolivia, Guatemala o Perú, donde los datos se invierten. En el ámbito político destaca, sin embargo, que tan sólo el 22 por ciento de los escaños en la región estaban ocupados por mujeres.

MORTALIDAD INFANTIL Y MATERNA

Por otra parte, Aasen aplaudió que la tasa de mortalidad infantil entre niños menores de cuatro años se haya disminuido "considerablemente", algo que no sería aplicable a Haití, Guyana, Bolivia y Guatemala.

Para el quinto ODM, relativo a la mortalidad materna, el objetivo marcado "aún está lejos" en tres cuartas partes de los países. Desde UNICEF se lamenta que los avances siguen "demasiado lentos", si bien, por ejemplo, la probabilidad de muertes de mujeres durante el embarazo o el parto es diez veces mayor en Perú que en Uruguay.

América Latina y el Caribe tampoco ha mejorado mucho en la lucha contra el VIH y el sida, pese a que la región alberga a un total de 20 millones de personas con esta enfermedad. De hecho, la tendencia actual es hacia el incremento de las infecciones, especialmente entre jóvenes y mujeres, según UNICEF.

INVERSIÓN SOCIAL EN ÉPOCA DE CRISIS

Por su parte, la investigadora del Programa de Desarrollo Social, Infancia y Género del británico Overseas Development Institute, Caroline Harper, dedicó gran parte de su ponencia a destacar la importancia de la inversión social en época de dificultades económicas, como habría quedado demostrado en las crisis anteriores.

En este sentido, tachó de "muy preocupante" el descenso de la ayuda pese a que la crisis económica termina trasladándose a la población. Sólo en África, se calcula que murieron entre 300.000 y 500.000 personas más durante las actuales crisis alimentaria y económica.

Harper manifestó que los efectos de la crisis a nivel macroeconómico terminan afectando a las familias, que sufren un menor acceso a servicios públicos, un descenso del crédito o pérdida de empleo. Además, en un contexto global, las situaciones de los países desarrollados terminan repercutiendo en los menos avanzados, hasta el punto de que, por ejemplo, en Camboya se destruyeron 100.000 empleos en septiembre de 2009 por la retirada de inversión internacional.

La experta dijo que la delicada situación laboral ha llevado a muchas familias a responder a la falta de ingresos con el pluriempleo de los padres o, en algunos casos, permitiendo el trabajo infantil.

Harper explicó que para los gobiernos gastar en tiempos de crisis es "difícil" pero "rentable a largo plazo". Especialmente, pidió "convertir la crisis en oportunidades para proteger a los niños", con el objetivo de "proteger el futuro".