Actualizado 30/03/2007 03:55

EEUU/Bolivia.- EEUU destaca la iniciativa de Evo Morales de reducir los cultivos de coca, pero le exige resultados


LA PAZ, 30 Mar. (EP/AP) -

El embajador de Estados Unidos en Bolivia, Philip Goldberg, calificó como una "buena señal" el reciente anuncio del presidente boliviano, Evo Morales, de hacer esfuerzos para bajar los cultivos de coca, pero advirtió de que lo que cuenta son los resultados.

"El presidente Morales habló de hacer muchos más esfuerzos para bajar los cultivos de coca", indicó Goldberg, quien precisó que "es algo que necesita resultados". "Nosotros necesitamos ver resultados y no solamente un deseo de hacerlo", puntualizó ayer el diplomático ante la prensa.

No obstante, Goldberg destacó los resultados en la lucha contra las mafias narcotraficantes, aunque aclaró que "es imposible separar la interdicción, en donde estamos trabajando muy bien, y la disponibilidad de coca que puede producir más cocaína".

La ley permite la siembra legal de 12.000 hectáreas de coca para usos alimenticios y medicinales, pero según el último informe conocido en marzo de 2006, había otras 14.500 hectáreas adicionales que deben ser erradicadas. En los próximos días se conocerá una nueva medición de la superficie cultivada realizada por el Departamento de Estado de Estados Unidos.

En este sentido, durante un encuentro con cultivadores de coca de una región del norte de La Paz, Morales manifestó el pasado sábado su preocupación por el aumento de la coca y por una desproporción en la superficie cultivada. "Hay familias que tienen un cato, otras dos, pero otras tienen hasta dos hectáreas", aseguró. Mientras que su gobierno intenta que cada cultivador del arbusto conserve una cuota equivalente a 1.600 metros cuadrados.

Asimismo, Goldberg afirmó que Washington comparte la preocupación de países vecinos como Brasil y otros de Europa sobre el incremento del narcotráfico debido a una mayor cantidad de coca.

"En este momento hay más coca y como resultado los países vecinos y europeos tienen mayor preocupación", compartida por Estados Unidos, subrayó.