WASHINGTON, 24 Mar. (EUROPA PRESS) -
La torre de control del aeropuerto de Reagan en Washington no dio instrucciones de aterrizaje a primera hora del miércoles a dos aviones en vuelo comercial, cuyos pilotos tuvieron que aterrizar sin servicio de control en el aeródromo con un total de 165 pasajeros y tripulantes a bordo.
La torre, que habitualmente cuenta con un controlador aéreo desde medianoche hasta las seis de la mañana, no respondió a las peticiones de los pilotos de asistencia de aterrizaje ni a las llamadas de teléfono de otros controladores de la región.
Mientras, un Boeing 737 de American Airlines (AA) proveniente de Miami con 97 pasajeros a bordo rodeaba al aeropuerto sin recibir respuesta de la torre a media noche. Minutos después, un A320 de United Airlines que volaba con 68 pasajeros desde Chicago tampoco recibió respuesta de control a sus requerimientos.
Ambos aviones aterrizaron sin problemas tras tomar las riendas de las operaciones los propios pilotos emitiendo sus progresos una vez iban tomando tierra. También se comunicaron con otros controladores de la región que no están dedicados a las operaciones de aterrizaje.
La Administración Federal de Aviación (FAA, en sus siglas en inglés), está investigando este incidente. Mientras, el secretario de Transportes, Ray LaHood, aseguró que está dando instrucciones a la agencia para que aumente la plantilla de controladores en el aeropuerto durante la noche.
"Hoy mismo me he dirigido a la FAA para incorporar dos controladores aéreos en el aeropuerto de Reagan de Washington en el turno de noche de la torre de control", señaló en un comunicado, en el que reconoce que "no es aceptable" contar sólo con un controlador en un punto del espacio aéreo "tan crítico".
Es más, el responsable aseguró que le ha propuesto al administrador de la FAA, Randy Babbitt, estudiar los niveles de plantilla de otros aeropuertos del país.
El incidente, que está siendo revisado por el Consejo de Seguridad Nacional de Transporte, no es el primero, según fuentes cercanas a las operaciones de control. Hubo una primera vez que sucedió algo parecido, cuando un controlador se dejó su tarjeta de acceso a la torre en un momento en el que se ausentó de ella y no pudo volver a entrar.