Actualizado 05/10/2008 16:03

España/Argentina.- España y Argentina ultiman en Kioto el 'arranque' de un centro de investigación en genómica vegetal


KIOTO (JAPÓN), 5 Oct. (de la enviada especial de Europa Press, María Pin) -

La ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, se reunió hoy en Kioto (Japón), con su homólogo argentino, el ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, Lino Barañao, para concretar la puesta en funcionamiento del Centro Binacional de Genómica Vegetal, con sede en la ciudad argentina de Rosario. Cada país aportará un millón de euros y la evaluación y gestión será conjunta y ambos mandatarios esperan poder anunciar su 'arranque' antes de que finalice el año.

El contacto bilateral se celebró en el marco de la celebración del V Encuentro Anual de la Ciencia y la Tecnología en la Sociedad (STS), que se celebra estos días en la antigua capital imperial con la asistencia de unos 800 políticos, científicos y líderes económicos de todo el mundo.

Así, el responsable argentino avanzó, en declaraciones a Europa Press, su esperanza de que el decreto presidencial que permitirá la puesta en funcionamiento de esta nuevo centro de investigación con tan "novedosa" estructura (un consejo de gobierno dependiente de dos Estados) pueda aprobarse dentro de este mismo mes, con el visto bueno de ambos países ya que debe respetar la normativa de ambos.

"Es un acuerdo que viene negociándose desde hace tiempo y confiamos en que este mes pueda ver la luz el decreto presidencial para poder iniciar proyectos conjuntos en la temática de la genómica vegetal", explicó, al tiempo que aseguró que su existencia permitirá también la movilidad de científicos españoles, así como la continuidad de proyectos a lo largo de todo el año debido a que ambos estados se encuentran en hemisferios distintos.

Por su parte, Garmendia recordó que la negociación bilateral lleva abierta desde el año 2003. "Hemos quedado de acuerdo en que lo vamos a impulsar de forma concreta, vamos a revisar los acuerdos y remover las barreras que nos impide llevarlo adelante, nosotros tenemos la dotación presupuestaria y tenemos el proyectos", indicó. Así, apuntó, en declaraciones a Europa Press, que espera poder lanzar este Centro antes de que finalice el año. La ministra apostó por este tipo de colaboración conjunta porque "va más allá del intercambio de estudiantes e investigadores".

El Centro Binacional de Genómica Vegetal será una instalación de investigación y desarrollo biotecnológico generada en el marco del Convenio Básico de Cooperación Científica y Técnica entre el Gobierno de la República Argentina y el Gobierno del Reino de España y sus áreas de investigación son la búsqueda de resistencia a estrés bióticos y abióticos en plantas; molecular farming (fábrica de medicamentos en plantas); proyectos genómicos y de fortificación alimentaria; e investigaciones relacionadas con el sector forestal y biología animal. En él trabajarán unos 400 profesionales. La institución se ubicará frente a otra instalación científica, el Instituto público-privado de Agrobiología, lo que permitirá el uso conjunto de sus invernaderos.

OTRAS COLABORACIONES

Junto a este proyecto, el ministro argentino trasladó a su homóloga española la petición de que España apoye a Argentina en la creación de empresas de base tecnológica. "Ahora tenemos un programa con el Banco Mundial de unos 150 millones de dólares, pero queremos aprender de la experiencia española con sus grandes parques tecnológicos", explicó. Mientras Garmendia aseguró que también se trataron temas relacionados con la cooperación en bio y nanotecnología.

Curiosamente, Baraño y Garmendia están en sus respectivos países al frente de un ministerio de nueva creación, implementado hace pocos meses, con el objetivo de promover el conocimiento y facilitar su transferencia desde el ámbito académico hacia el sector productivo. No obstante, lo que diferencia a ambos departamentos es que el español aúna las competencias en ciencia, investigación, desarrollo tecnológico y educación superior, mientras que el argentino, por el contrario, no tiene responsabilidades en Universidad, salvo en los aspectos relacionados con la investigación.