Actualizado 17/10/2006 19:34

España.- El domingo se celebra nueva edición del Domund que recaudará fondos para cooperar con África, América y Asia

En las misiones hay 1.300 voluntarios navarros, cuya edad media es de 65 años


PAMPLONA, 17 Oct. (EUROPA PRESS) -

El próximo domingo, 22 de octubre, se celebrará el 'Domund', el Domingo Mundial de las Misiones, que este año cumple 80 años y que en Navarra estará dedicado al V Centenario del Nacimiento de San Francisco Javier. Los fondos recaudados en esta edición se destinarán a proyectos de cooperación en África, América y algún país de Asia.

Según explicó en rueda de prensa Ángel Echauri, delegado de las Misiones de Pamplona, el lema de este año es 'San Francisco Javier, Testigo y Maestro de la Misión', y los objetivos son presentar a Javier como un ejemplo de quienes descubren en su vocación cristiana el compromiso misionero, implicar a los fieles en la oración, el sacrificio y la cooperación económica con las misiones, y promover el ejercicio de la caridad como "el alma de toda actividad misionera".

El pasado año se recaudaron en toda España 26,64 millones de euros para atender las necesidades misioneras a través de donativos en las iglesias, de los cuales 1,1 millones se recogieron en Navarra. Además, desde la Comunidad foral se enviaron 18 toneladas de medicamentos por valor de 5 millones de euros y lotes de ropa por 34.000 euros.

A los donativos y las colectas se suman también herencias, legados y testamentos, así como suscripciones periódicas domiciliadas que a lo largo del año se envían para las misiones. Ángel Echauri indicó que "hay que vestir la dignidad humana, muchas veces desfigurada por el hambre, la miseria, la guerra y la corrupción política", ya que cuando a una persona "se le trata con dignidad, lo aprende".

1.300 MISIONEROS NAVARROS

En las misiones hay un total de 1.300 voluntarios navarros, cuya edad media es de 65 años. Durante el último año se han producido 15 altas y 30 bajas por fallecimiento. Según señaló Echauri, los misioneros son "la cara más bonita y comprometida de la Iglesia, los mejores mensajeros de la paz", y añadió que son ellos los que denuncian la injusticia y defienden a los débiles.

En la rueda de prensa se encontraban presentes tres misioneros, Amaya Razquin -en Bolivia-, Fermín Moriones -en Panamá-, y Miguel Ángel Cabodevilla, en Ecuador. Éste último, de la orden capuchina y vecino de Artaiz, lleva más de 15 años en la selva amazónica, en la frontera con Colombia y Perú, donde existen numerosos problemas por tráfico de drogas, la guerrilla y enfrentamientos con indígenas.

Según apuntó Cabodevilla, de 57 años, los grupos indígenas "están siendo exterminados porque viven encima de la riqueza petrolífera y de minerales". Esta situación, dijo, genera "una enorme pérdida humana, pero también intelectual", ya que "sólo ellos mantienen la sabiduría de la selva".

Por su parte, Amaya Razquin, salesiana de 72 años, ha participado en la creación de numerosos proyectos como un colegio y la construcción de casas de acogida para 120 madres con una media de seis hijos, que han sido maltratadas y abandonadas por sus maridos.

Asimismo, ha promovido una residencia para chicas jóvenes que son enviadas a la ciudad y viven en la pobreza. Con este proyecto han conseguido que vayan a la escuela, y algunas de las ellas están cursando estudios universitarios. "Van superando las barreras, porque queremos que los talentos se puedan fomentar y que la sociedad no las condene", afirmó. Esta religiosa cree que tener compasión "no es quedarse parado, sino hacer algo para remediar su situación".

Fermín Moriones, agustino recoleto natural de Liédena, lleva 46 años en Panamá ayudando a los presos en las cárceles y visitando a los enfermos en los hospitales. Llegó a América en 1960 y, según explicó, su trabajo es "dar esperanza" a las personas encarceladas y acompañarlas durante los juicios para "ayudarles y animarles".