Actualizado 19/04/2007 16:50

España.- SOS Racismo denuncia que sigue habiendo cerca de un millón de inmigrantes 'sin papeles' pese la regularización


BARCELONA, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -

SOS Racismo denunció hoy que tras el proceso extraordinario de regularización en España sigue habiendo entre 750.000 y un millón de personas en situación irregular, porque el 15% de los que normalizaron su situación entonces --557.800 en total-- no han conseguido renovar sus permisos en 2006 y han vuelto a engrosar las listas de indocumentados.

La organización presentó hoy su informe 2007 sobre el racismo en España, en el que aseguran que a ese 15% se suman los que no lograron regularizar si situación durante el proceso y a los que han llegado a España en este tiempo, lo que, según la portavoz de SOS Racismo en Catalunya, Begoña Sánchez, significa que "volvemos a estar como antes", porque el proceso "no abordó las causas" de la inmigración.

Según Martínez, el procedimiento extraordinario "fue un balón de oxígeno para 600.000 personas, pero muchas de ellas se han vuelto a quedar en situación irregular y sin un nuevo proceso su situación es muy difícil". De hecho, una de las peticiones del informe es que se implanten medidas permanentes de regularización y que entretanto se flexibilicen los criterios de renovación de permisos.

SÓLO UN 5% POR MAR.

Entre los datos del informe, destaca el hecho de que los inmigrantes que intentaron entrar de forma irregular a España por vía marítima representaron un 5% del total, frente al 80% que lo hicieron por vía aérea y el 15% que utilizaron el transporte terrestre, "contrariamente a la idea de que el discurso político y los medios de comunicación han contribuido a fomentar", tras la llamada "oleada de cayucos".

En las costas africanas se han recuperado unos 600 cadáveres de personas que intentaban llegar a las islas desde África, aunque, según el Gobierno canario, fueron unos 6.000 inmigrantes africanos los que murieron cuando trataban de alcanzar las costas canarias en 2006, mientras que unos 31.000 alcanzaron el archipiélago.

SOS Racismo denunció que la Unión Europea está llevando a cabo una estrategia de "externalización" al "trasladar las fronteras a los países que no respetan los principios democráticos", como Marruecos o Mauritania, en un enfoque "que en ningún caso resolverá el control de flujos y mucho menos los parará".