Publicado 07/02/2018 22:56

Estados Unidos lanza un grupo para expandir Internet en Cuba pese a las críticas del castrismo

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   MADRID, 7 Feb. (EUROPA PRESS) -

   El Gobierno de Estados Unidos ha reunido este miércoles por primera vez al Grupo de Trabajo sobre Internet en Cuba, una comisión que tendrá como principal objetivo fomentar el flujo de información en la isla y que es visto con recelo por parte del Ejecutivo de Raúl Castro.

   El presidente norteamericano, Donald Trump, ordenó en junio de 2017 la creación de este grupo, integrado por funcionarios de la Administración pero también por personas ajenas. Al frente de este comité estará el secretario de Estado adjunto para Asuntos del Hemisferio Occidental, John S. Creamer.

   Durante el próximo año, "examinará los retos y oportunidades tecnológicas para expandir el acceso a Internet en Cuba con el objetivo de ayudar al pueblo cubano a disfrutar de un flujo libre y sin regulación de la información", ha explicado el Departamento de Estado en un comunicado.

   El grupo de trabajo consta de dos subcomités --uno encargado de analizar el papel de los medios y la libertad de información y otro que examinará el acceso a Internet-- que deberán presentar sus primeras recomendaciones en un plazo de seis meses. La comisión, de hecho, volverá a reunirse en octubre para examinar esos informes preliminares, a partir de los cuales se redactará un documento final.

   Estos trabajos no cuentan con el beneplácito del régimen castrista, tal como queda en evidencia en un artículo publicado este miércoles en el periódico oficial 'Granma' y en el que se alude al Grupo de Trabajo sobre Internet en Cuba como "una reedición de aquellos viejos planes subversivos, cuyos antecedentes se remontan al propio inicio de la Revolución".

   El Ministerio de Asuntos Exteriores de Cuba también expresó su malestar la semana pasada, por considerar la creación de la nueva comisión una "violación flagrante de la soberanía cubana". En una nota entregada al encargado de negocios norteamericano, alegó que supone un "intento de manipular Internet para llevar a cabo programas ilegales con fines políticos y de subversión para alterar el orden constitucional de Cuba".