LOS ANGELES (Reuters/EP) - Los detalles del sepelio público de la estrella del pop Michael Jackson aún eran un secreto el domingo, mientras la policía de Los Angeles se preparaba para la multitud de fanáticos que llegaría al lugar.
Cerca de 1,6 millones de personas se registraron para ser uno de los 17.500 que podrán ingresar al funeral que será celebrado en el Staples Center del centro de Los Angeles o para verlo en una de las pantallas gigantescas de un teatro cercano.
Un portavoz de la familia declinó dar detalles del evento y tampoco habló sobre la ceremonia privada que será realizada.
Jim McDonnell, subjefe de la policía de Los Angeles, dijo que espera que la ceremonia pública dura dos horas e instó nuevamente a aquellos fanáticos sin entradas que no acudan al funeral.
"Si quieren verlo, necesitarán encontrar una televisión y lugar para verlo", dijo McDonnell.
Consultado sobre si la policía usaría equipo antidisturbios, McDonnell dijo que no pero que sí utilizarían técnicas de "manejo de multitudes" si fuera necesario.
"Los Angeles está acostumbrado a grandes eventos. Esto es Hollywood", precisó el domingo en una conferencia de prensa.
El sepelio sería transmitido en vivo en la televisión estadounidense y por internet.