Actualizado 08/09/2014 18:16

Francisco acepta renuncia de un cardenal sospechoso de encubrir denuncias de abusos sexuales

ROMA, 8 Sep. (EUROPA PRESS) -

   El Papa Francisco ha aceptado la renuncia del máximo responsable de la jerarquía católica en Irlanda, el cardenal Sean Brady, de la Diócesis de Armagh (Irlanda), sospechoso de no haber sabido afrontar denuncias de abusos sexuales atribuidos a clérigos.

   Según ha explicado la Oficina de Información de la Santa Sede, el Papa ha aceptado la renuncia en conformidad con el canon 401 - 1 del Código de Derecho Canónico, que establece: "Al Obispo diocesano que haya cumplido setenta y cinco años de edad se le ruega que presente la renuncia de su oficio al Sumo Pontífice, el cual proveerá teniendo en cuenta todas las circunstancias".

   La Santa Sede ha explicado de esta forma que la dimisión se da por límite de edad y que le sucederá Monseñor Eamon Martin, que hasta ahora era el arzobispo coadjutor de la misma diócesis.

   En marzo de 2010, los medios irlandeses revelaron por primera vez que, cuando era sacerdote en 1975, Brady estuvo presente en dos reuniones en las que se pidió a dos niños víctimas de los abusos del cura Brendan Smyth que firmaran juramentos de silencio. La Conferencia Episcopal de Irlanda, como luego hicieron público L'Osservatore Romano y Radio Vaticana, aclararon que el padre Brady participó en esa investigación, asistiendo a la entrevista de dos víctimas, y transmitiendo los resultados a sus superiores.

   El primado no alertó entonces ni a los padres y ni a las autoridades civiles sobre los abusos porque, según explicó él mismo, participó en aquella investigación en calidad de mero administrativo, solo para tomar notas e informar a sus superiores.

   Marie Collins, que sufrió abusos en su juventud por parte de un sacerdote y que es miembro de la comisión del Vaticano contra la pederastia creada por Francisco ha explicado a través de un mensaje en Twitter que "si el cardenal Brady hubiera dimitido cuando se hicieron públicos los fracasos de Brendam Smyth en 2010, hubiera significado algo para los supervivientes, y hubiera tenido sentido hoy".

   El 19 de marzo de 2010, Benedicto XVI escribió una carta a los católicos de Irlanda en el trató por primera vez los casos de abusos sexuales. Como anunciaba en esa carta, en mayo de 2010 nombró a cinco arzobispos y cuatro religiosos para llevar a cabo una inspección y en marzo de 2012 se presentó un sumario con los resultados de la visita.

   El 22 de abril de 2010 el papa Benedicto XVI acepta la renuncia de James Moriarty, obispo de Kildare y Leighlin, en Irlanda, que fue obispo auxiliar en Dublín entre 1991 y 2002. Moriarty afirmó que renunciaba porque "debería haber desafiado la cultura predominante", aunque no era acusado directamente en el Informe Murphy.