Actualizado 14/08/2007 01:12

Guatemala.- Los 46 niños encontrados en una casa cuna clandestina serán enviados a varios albergues


ANTIGUA, (GUATEMALA), 13 Ago. (EP/AP) -

Los 46 niños encontrados en una casa cuna clandestina en la ciudad guatemalteca de Antigua han sido trasladados, bajo supervisión de un juez de menores, a varios albergues mientras se investiga su situación jurídica.

"Vamos a investigar caso por caso, tenemos que establecer la legalidad de los trámites de adopción y de su estadía en la casa cuna conocida como Casa Quivira", declaró hoy a AP el delegado de la Procuraduría General de la Nación (PGN), Carlos Azurdia.

La PGN es el organismo encargado de autorizar las adopciones en Guatemala. Azurdia añadió que mientras se realiza la investigación el organismo ha pedido que los niños sean llevados a varios albergues de menores en el departamento de Sacatepéquez, al que pertenece Antigua, una ciudad situada a unos 50 kilómetros al oeste de Ciudad de Guatemala.

Casa Quivira, la vivienda en la que se encontraron los 46 niños, de entre 3 días de vida y 2 años de edad, es propiedad del ciudadano estadounidense Clifford Philips y su esposa, la guatemalteca Sandra González. "Hablan de ilegalidades y de expedientes incompletos, pero no nos dieron oportunidad de demostrar nada. Solo nos tomaron presas", dijo a la AP la encargada de Casa Quivira, Sandra Leonardo López, quien anunció que aunque los dueños están en el extranjero esperan su llegada "en los próximos días".

"No existe ningún niño robado en la casa y podemos demostrar la legalidad de todos ellos", aseguró López, que está detenida.

El sábado se rescató a los 46 niños en Antigua gracias a un operativo conjunto, que duró 14 horas, de la Policía Nacional Civil (PNC), el ministerio Público (MP) y la Procuraduría General de la Nación (PGN). Se determinó que los menores carecía de documentación judicial sobre adopción y fueron detenidas dos abogadas, las cuales fueron puestas a disposición del Juzgado de Paz de Antigua. Se trata de Vilma Desiré Zamora de 34 años de edad y de Sandra Patricia Leonardo, de 42 años.

"Tendremos que iniciar una investigación sobre cada uno de ellos (los bebés) para determinar si habían sido robados a los padres biológicos o si algunas madres habían sido obligadas a darlos en adopción", dijo el domingo a la AP el procurador general de la nación, Mario Gordillo.

Los menores ahora están bajo los cuidados de la Procuraduría General de la Nación, entidad que autoriza las adopciones en Guatemala, "hasta que se logre determinar la situación de cada uno", según indicó el portavoz de la Policía, Carlos Caljú.

La procuradora de la Niñez de Guatemala, Josefina Arellano, indicó que no tenían documentación completa de los niños y que la poca que existía eran escritos notariales y documentos incompletos, pero ningún caso había sido tramitada en el juzgado pertinente.

Por su parte, el comisario Luis Sul, detalló que la investigación comenzó hace un mes después de que ser registraran varias denuncias de los vecinos que observaron cómo cada día llegaban vehículos con extranjeros que recogían niños. La secretaría del Bienestar Social de la Presidencia confirmó que el hogar era clandestino y que carecía de autorización alguna, según informó el diario guatemalteco 'La Prensa Libre'.

IRREGULARIDADES Y VACÍO LEGAL

Sólo en 2006 desde Guatemala, un país de unos 12,5 millones de habitantes, se enviaron legalmente a 4.135 niños sólo a Estados Unidos. Uno de cada 100 niños nacido en el país centroamericano es dado en adopción a padres estadounidenses. Asimismo han aumentado las denuncias de robo de niños en regiones del interior del país y en algunas ocasiones se han producido linchamientos contra quienes estaban sospechosos de secuestrar menores para darlos en adopción.

Hasta el pasado mes de enero el congreso de Guatemala no había aprobado la adhesión del país al convenio de La Haya sobre el tema. Finalmente en enero de 2008 entrará en vigor y las normas de adopción serán más rigurosas, lo cual se espera que contribuya a frenar la salida masiva de niños del país.

El pasado mes de marzo, la Embajada de Estados Unidos anunció que revisaría detenidamente todos los casos de adopción debido a las sospechas existentes de que algunos de los menores son llevados de lado de sus madres bajo coacciones o incluso que podrían estar siendo procreados para darlos en adopción.

A raíz de que se conocieron denuncias por robo de niños para ser dados en adopción, la Embajada de Estados Unidos pide desde el 6 de agosto que todos los niños pasen dos pruebas de ADN antes de recibir el visado legal para ser adoptados por ciudadanos de ese país. El objeto de esa prueba es garantizar que la mujer que da al niño en adopción sea la madre biológica.

Anteriormente, se hacía una sola prueba pero existía la posibilidad que los menores fueran adoptados con el examen de algún otro niño.

Para adoptar un niño en Guatemala no es necesaria la opinión de un juez, como en la mayoría de países. En cambio, una madre puede dar su hijo a otra persona con la asistencia de un notario.

Algunos notarios que se dedican a ese negocio se encargan de buscar las mujeres embarazadas, cuidar a los niños desde que nacen y hasta proveer alojamiento a las parejas de padres adoptivos durante su estadía en el país. A cambio cobran una "cuota local" que oscila entre los 19.000 (unos 13.960 euros) y 23.000 dólares (casi 16.900 euros), de acuerdo con sitios de internet de agencias de adopción estadounidenses.