Actualizado 26/05/2006 23:52

Haití.- El jefe de la Misión de la ONU en Haití apoya la entrada de jueces extranjeros en el sistema judicial del país


GUATEMALA, 26 May. (EP/AP) -

El jefe entrante de la Misión de Naciones Unidas (Minustah) en Haití, el guatemalteco Edmond Mulet, afirmó hoy que pedirá la ampliación de su mandato para que esa fuerza de paz realice tareas de desarrollo, y anunció que negociará que el Gobierno del país caribeño admita magistrados extranjeros en su sistema judicial.

"En agosto se va a renovar el mandato y lo que se trata es de caminar hacia una ampliación de mandato. El objetivo es transformar esta presencia de seguridad y estabilización en algo puramente de desarrollo", explicó Mulet, quien anteriormente ejerció como embajador de Guatemala ante la Unión Europea.

No obstante, reconoció que la transición hacia una fuerza internacional de reconstrucción y desarrollo no se podrá dar en tanto no mejoren las condiciones de seguridad en el país caribeño, el más pobre del continente.

"Todavía, a mi juicio, es importante el tema de seguridad de pacificación y estabilización de acá a fin de año para ver cómo se desarrollan los seis primeros meses del Gobierno de (el presidente René) Preval", añadió el jefe de la Misión de la ONU, que llegará a Haití el próximo 2 de julio.

Para alcanzar esa seguridad, es preciso, según explicó Mulet en una entrevista a AP, que las fuerzas policiales haitianas, que actualmente son "muy reducidas y muy básicas" con sólo unos 6.000 efectivos, tengan capacitación y desarrollo.

EL TEMA DE LA VIOLENCIA

La Misión de Naciones Unidas en Haití buscará tener derecho a vetar a los aspirantes a conformar la fuerza policial con base en antecedentes criminales u otros motivos que hagan sospechar de vínculos con los grupos del crimen organizado.

Aunque desde la elección del presidente Preval el pasado mes de febrero ha habido un "significativo descenso en la violencia", según Mulet, aún queda mucho camino por recorrer, matizó. Las pandillas callejeras continúan siendo un grave problema de seguridad en Haití y, en su opinión, es preciso continuar con los programas de desarme.

Además, anunció que buscará dialogar con los países vecinos con el fin de obtener un compromiso para combatir el tráfico ilegal de armas hacia el país caribeño.

SISTEMA JUDICIAL

Por otro lado, Mulet subrayó que una de sus primeras acciones será negociar con el Gobierno haitiano un acuerdo para reformar el sistema de justicia. Uno de los puntos más delicados de ese acuerdo será el de admitir magistrados extranjeros para dictar sentencias en el país caribeño.

"Tendremos que contratar funcionarios internacionales, porque no hay funcionarios haitianos. Tendremos que traer jueces de países francoparlantes, de Francia, de Quebec, de Africa, que tienen más o menos el sistema jurídico francés", declaró el ex congresista de 55 años. Para Mulet, "la ventaja es que ellos (los haitianos) saben de la necesidad que hay de reformar el sistema de justicia".

Igualmente, explicó que con un incremento en la seguridad, llegarán inversiones extranjeras, crecerá la economía y el país podrá salir del bache en que se encuentra sumido. "Actualmente, no hay dinero ni para pagar a los empleados públicos, por eso tendré que acudir a las instituciones internacionales a pedir ya no préstamos, sino donaciones", resaltó.

Además de explotar su potencial turístico, agregó Mulet, el país podría aprovecharse de su eventual trato preferencial para exportar al mercado estadounidense textiles confeccionados en la isla.

La Minustah cuenta hoy con unos 8.500 uniformados de países como Brasil, Argentina, Chile, Uruguay, Perú y Guatemala. Los militares extranjeros llegaron en 2004 tras una revuelta popular que depuso al presidente Jean-Betrand Aristide.