Actualizado 17/08/2010 00:52

Honduras.- Al menos una persona ha muerto por la tormenta que ha activado la alerta amarilla en el centro de Honduras


TEGUCIGALPA, 16 Ago. (EUROPA PRESS) -

Al menos una persona ha muerto y otras tres han desaparecido en Honduras a causa de la llegada de la vigésimo quinta tormenta tropical de la temporada que ha obligado a decretar la alerta amarilla por lluvias en el Distrito Central y el departamento de Comayagua y la verde en otros diez departamentos, según informó este lunes la Comisión Permanente de Contingencias (COPECO).

El alcalde de Tegucigalpa, Ricardo Álvarez, confirmó la muerte de Adela López, una vendedora de 43 años, que se ahogó en uno de los mercados de la capital debido a las inundaciones provocadas por las intensas precipitaciones.

En este contexto, la COPECO ha declarado la alerta amarilla en el centro del país, que permanecerá vigente durante las próximas 48 horas y supondrá la inmediata evacuación de los habitantes de las zonas calificadas como de alto riesgo -- la mayoría del territorio a excepción del norte-- por deslizamientos e inundaciones.

Mientras, la alerta verde, que llama a la precaución, afectará a los departamentos de Choluteca (sur), Valle (sur), Lempira (oeste), Ocotepeque (oeste), Copán (oeste), Intibucá (oeste), La Paz (centro), El Paraíso (este), Atlántida (norte) y Santa Bárbara (norte), durante el mismo lapso de tiempo.

Las autoridades han recomendado a la población que restrinja los traslados o, en su defecto, que estacione sus vehículos en la cuneta de las carreteras hasta que pase la tormenta y que evite resguardarse de ella debajo de árboles o antenas en caso de que haya actividad eléctrica. Además, sugieren que evite cruzar quebradas y ríos para no ser arrastrada por la corriente.

El Servicio Nacional de Meteorología indicó que la tormenta descargará una media de entre 40 y 60 milímetros de agua en las zonas bajas de la capital y de sus alrededores, el sur y el este del país, mientras que en el oeste podría alcanzar hasta los 70 milímetros. Se esperan también tormentas eléctricas con vientos rachados y abundante nubosidad.

Sin embargo, el fenómeno, que abandonará el país en un plazo de 24 o 36 horas, apenas afectará a las localidades del norte donde, de momento, no se ha activado ningún plan de prevención ni emergencia, según informaron medios locales.