CIUDAD DE MÉXICO, 8 Dic. (Notimérica) -
La inseguridad y la delincuencia se posicionan como la principal preocupación de los mexicanos (66,4 por ciento), según ha constatado un informe del Instituto Nacional de Estadística y Geografía de México (INEG).
El documento, publicado con motivo del Día Internacional contra la Corrupción, que se conmemora este viernes 9, también agrega que la corrupción es el segundo problema que más preocupó a la población en México durante el año 2015.
"En 2015, nueve de cada diez personas de 18 años y más consideró que la corrupción se observa de manera frecuente en las policías y los partidos políticos", dice el INEG.
Asimismo, la institución constata que el 12,6 por ciento de los mexicanos que realizaron un trámite, pago o solicitud de servicio ante algún servidor público, fueron víctimas de al menos un acto de corrupción en 2015, una cifra que "no presentó cambios significativos respecto del año 2013".
Por contra, las experiencias de corrupción por cada víctima sí que aumentaron en este periodo, pasando de 2 a 2,4 eventos de media en el año.
La corrupción además ha sido percibida en primera persona por parte de los mexicanos. Según el sondeo, dos de cada diez hombres que tuvieron contacto con algún servidor público experimentaron alguna situación de corrupción en 2015, mientras que en las mujeres la razón fue de una de cada diez.
Otra de las características de las víctimas de corrupción es que la probabilidad de experimentar algún acto de este tipo es mayor si las personas disponen de ingresos más altos, cuyo nivel suele depender de la escolaridad y la condición de ocupación. Prueba de ello es que en el grupo de adultos de educación superior hubo poco más de 18 víctimas por cada 100 personas, una cifra que disminuye a siete en caso de los mexicanos sin estudios.
Al respecto, uno de los datos más significativos es el alto nivel de impunidad que presentan los casos de corrupción. El 98,3 por ciento de las víctimas de corrupción el pasado año no denunció el hecho. "De éstas, una tercera parte no lo hizo por considerarlo ineficaz o por creer que no se le daría seguimiento adecuado a la denuncia", añade el informe.
Estos datos se presentan a pesar de las medidas instauradas por el Gobierno de Enrique Peña Nieto. En 2015 se promulgó la reforma constitucional que sentó las bases para el Sistema Nacional Anticorrupción (SNA), el cual tiene como finalidad establecer, articular y evaluar la política en la materia.
De igual forma, en dicho año también se definió la creación de la Fiscalía Especializada en Materia de Delitos relacionados con Hechos de Corrupción, con el objeto de investigarlos y perseguirlos.