Actualizado 21/08/2015 13:02

Más de 2,5 millones de personas con carencia alimenticia por sequía en Centroamérica

   MADRID, 20 Ago. (Reuters/Notimérica) -

   Una severa sequía que afecta a América Central por el fenómeno climático 'El Niño' ha dejado este año a más de 2,5 millones de personas con carencia alimenticia. Una cifra ligeramente superior a la casos registrada el año pasado, según informó un funcionario de Naciones Unidas.

   Campesinos del llamado Corredor Seco de Guatemala, Honduras, El Salvador y Nicaragua han perdido, por segundo año consecutivo, sus cultivos de productos básicos para subsistir, como son el maíz y los frijoles, y han empezado a reducir la ingesta de alimentos, según el Programa Mundial de Alimentos (PMA).

   "Este año la sequía causó problemas alimentarios a más de 2,5 millones de personas y de ellas entre 1,2 y 1,3 millones necesitan asistencia inmediata", dijo a Reuters el jefe regional del PMA de Naciones Unidas para Latinoamérica y el Caribe, Miguel Barreto.

   Barreto señaló el deterioro que la pérdida de cultivos está causando en las condiciones nutricionales de los habitantes de la región, especialmente en los niños: "Ya apreciamos que hay un incremento en los niveles de desnutrición aguda entre los niños, esta gente está comiendo menos de lo que debe comer y por tanto requiere una intervención humanitaria rápida".

   En 2014, la sequía en el Corredor Seco, situado en el noroeste de Nicaragua, el suroeste de Honduras y Guatemala y el oeste de El Salvador, causó problemas alimentarios a 2,5 millones de personas.

   Este año, los volúmenes de lluvia en América Central desde mediados de junio han registrado niveles por debajo del promedio en esta misma época en años pasados, según la Agencia para el Desarrollo Internacional de Estados Unidos.

   En Guatemala unas 119.000 familias están en situación de mayor vulnerabilidad, igual que unas 80.000 en Honduras y unas 40.000 en El Salvador, requiriendo de asistencia alimentaria inmediata en los próximos tres meses, dijo Barreto.

   Honduras declaró este mes un estado de emergencia debido a la pérdida de las cosechas en el Corredor Seco y aseguró que 161.000 familias han sido afectadas por la carencia de alimentos.

   Estas regiones, situadas en la costa del Pacífico, están entre las más áridas de América Central. Se trata de zonas habitadas por familias pobres dedicadas a cultivos de subsistencia y son crónicamente golpeadas por las sequías.

   Tanto PMA, como la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) han hecho un llamamiento para invertir en medidas estructurales en relación al manejo de recursos naturales, la adaptación de los sistemas productivos a la variabilidad del clima, y la mejora de infraestructuras y de los sistemas de alerta temprana.

   "Es indispensable que los países y la comunidad internacional prioricen recursos para hacer frente a las consecuencias e impactos negativos que la irregularidad y la insuficiencia de precipitaciones generan en los países centroamericanos, a través de medidas a corto y largo plazo", señalan Miguel Barreto y el coordinador de la Oficina Subregional de la FAO para Mesoamérica, Ignacio Rivera.

   A raíz de esto, se requiere, además, una especial atención y coordinación regional y por país debido al riesgo de canícula prolongada.

MEDIDAS EN OTROS PAÍSES.

   Además de Guatemala, Honduras, El Salvador y Nicaragua, la sequía ha tenido consecuencias en otros países de la zona.

   La situación ya ha causado importantes daños en los cultivos y ha dejado sin agua potable a un millón de personas en Cuba, y amenaza con agravarse durante los próximos meses. El Gobierno ha puesto en alerta al sistema de defensa civil cubano y ha comenzado a distribuir el agua en camiones cisterna y a racionar su consumo.

   Por su parte, el Canal de Panamá restringirá a partir de septiembre el paso de buques temporalmente, reduciendo de 39,5 a 39,0 pies el calado máximo permitido para atravesar el paso marítimo.

'EL NIÑO'.

   El Niño es un proceso climático cíclico que puede causar una alteración de la temperatura del agua a nivel mundial y sequías o incremento considerable de las precipitaciones en ciertas zonas del planeta.

   Este fenómeno está causado por el calentamiento del océano Pacífico ecuatorial e influye, especialmente, en regiones de América del Sur y Australia.

   Según previsiones, 'El Niño' actual podría causar más estragos que el registrado entre los años 1997 y 1998, el cual provocó inundaciones y sequías a nivel mundial.

   La Red de Sistemas de Alerta Temprana para la Hambruna (FEWSNET), ha alertado que existe una posibilidad del 90% de que el fenómeno de 'El Niño' persista hasta marzo del próximo año 2016.