Actualizado 04/01/2017 07:14

México celebra el Día del Periodista con 74 profesionales asesinados en 2016

PERIODISMO MÉXICO
REUTERS

   CIUDAD DE MÉXICO, 4 Ene. (Notimérica) -

   Las escuelas y las universidades en las que se imparte Periodismo mantienen la misma premisa de la profesión: buscar la objetividad para acercar la realidad al lector, espectador u oyente. No obstante, con el paso de los años, estos consumidores de información son conscientes de cómo estos acontecimientos dependen de quien los cuenta.

   Para determinar cual es la labor de estos profesionales se celebra en gran parte del mundo el Día del Periodista, que conmemora el asesinato del periodista checo Julius Fucik a manos de la Gestapo en 1943. En Iberoamérica, la conmemoración tiene lugar en diferentes días del año.

   A principios de año, el 4 de enero, México conmemora esta celebración de los profesionales de la información a la sombra de los últimos datos aportados por Reporteros Sin Fronteras (RSF), una organización no gubernamental que ha denunciado recientemente en su balance anual que un total de 74 periodistas han muerto en el país azteca en 2016 mientras ejercían su labor.

   A pesar de que el número es menor que el registrado el año pasado, con un total de 101 reporteros asesinados, el país iberoamericano lidera la lista de naciones en paz con mayor número de muertes. La ONG ha indicado que "este exilio masivo ha creado agujeros negros de la información en los que reina la impunidad y es el resultado del terror impuesto por los Depredadores de la Libertad de Prensa".

   Del total de fallecidos, el organismo determinó que se trataba de 57 periodistas profesionales, nueve periodistas ciudadanos y ocho colaboradores de medios de comunicación. En general, "casi tres cuartas partes de los periodistas que perdieron la vida fueron tomados como objetivos y asesinados deliberadamente", según ha destacado RSF.

TERCER PUESTO

   De los cinco países más mortíferos, México ocupa el tercer lugar, solo tras Siria y Afganistán. Le siguen Irak y Yemen. La posición del país iberoamericano se debe a cárteles como 'Los Zetas', según la organización, que "hacen reinar el terror en los estados del noreste y del Golfo de México".

   Para RSF "es evidente que se les toma como objetivos y que son asesinados por ser periodistas. Esta alarmante situación muestra el patente fracaso de las iniciativas internacionales para proteger a los periodistas y firma la sentencia de muerte de la información independiente en las zonas donde la censura y la propaganda se imponen por todos los medios".

A los secuestros y "actos de barbarie" perpetrados por ese tipo de agrupaciones militares, se suma la impunidad de los crímenes a causa de unas autoridades policiales y judiciales extremadamente corruptas que "cierran los ojos mientras los cárteles atacan a los periodistas".

   Uno de los casos más conocidos en 2016 fue el del periodista Pedro Tamayo Rosas quien, a los 43 años de edad, fue asesinado por dos criminales en la puerta de su casa frente a su familia y a la Policía, que no hizo nada por detener a los asesinos. El profesional se encontraba bajo una supuesta protección del Estado tras haber recibido varias amenazas de muerte.

   Otra periodista mexicana llamada Anabel Flores Salazar, empleada del diario 'El Sol de Orizaba', fue secuestrada el pasado 8 de febrero y hallada muerta a orillas de una carretera de Puebla un día después. La mujer, de 32 años, escribía sobre el crimen organizado en dicho periódico y fue una de las cinco mujeres del gremio asesinadas durante este año.

   En esta terrible lista de innumerables periodistas, aparecen los nombres de otros profesionales como Aurelio Campos, Agustín Pavia, Jesús Adrián Rodríguez Samaniego, Rubén Espinosa, Reinel Martínez, Marcos Hernández, Moisés Dagdug y Manuel Santiago Torres. Muchos de ellos fueron asaltados cuando salían de sus respectivos puestos de trabajo. La mayoría fueron asesinados tras haber sido torturados, mientras que otros como Bernardo Javier Cano y Enrique Juárez, fueron liberados al poco de ser secuestrados.

SEGURIDAD DE LOS PERIODISTAS

   Según la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, el 89 por ciento de los crímenes contra periodistas permanecen impunes, además de que un gran número de informadores tuvieron que exiliarse del país debido a diversas amenazas de muerte y presiones a las que eran sometidos.

   Ante esta situación, sobra decir que la Ley para la Protección de Personas Defensoras de los Derechos Humanos y Periodistas no actúa de ninguna de las maneras para intentar frenar esta inhumana forma de censura a través de la extorsión y el asesinato.

   Diseñada con el fin de garantizar la seguridad de quienes se encuentran en situación de vulnerabilidad y riesgo por la promoción de la accesibilidad a la información como derecho fundamental de las personas, entró en vigor en junio de 2012.

    Sin embargo, persiste la falta de personal capacitado para atender los casos, además de que muchos funcionarios del Estado y miembros de la Policía Federal mexicana continúan incumpliendo algunas de las medidas acordadas en dicha ley.

   Por su parte, Reporteros sin Fronteras ha aprovechado para hacer un llamamiento a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) tras la publicación del Balance Anual para pedirle la creación de un mecanismo concreto "que haga cumplir las resoluciones" con la urgencia de que se nombre a un representante especial para "la seguridad de los periodistas".

   El balance anual es uno de los principales informes de RSF, junto con la Clasificación Mundial (el ranking de 180 países que evalúa el grado de libertad de prensa); el Informe Anual (evolución del estado de la libertad de información durante un año en un centenar de países), o la lista de los Depredadores de la Libertad de Prensa: "el plantel de líderes, gobernantes y grupos que han declarado la guerra abierta a los periodistas, al pluralismo y a la libertad de información".

   Aunque los resultados de este informe hayan mejorado levemente frente a la evaluación del pasado año, aun queda muy lejos la opción de que México deje de ocupar los primeros puestos de la lista, debido a la impunidad, al desinformación y el hermetismo al que está sometido el país por parte de las autoridades.

   Es por eso que el Día del Periodista más que celebrar manifiesta la grave situación en la que se encuentra cualquier profesional de la información o persona anónima que quiera acceder a los medios de comunicación con total libertad.