Actualizado 30/08/2012 05:38

Los dos empleados de la Embajada de EEUU en México atacados por policías federales son agentes de la CIA

Podría tratarse de una "emboscada" con policías corruptos y criminales


TRES MARÍAS, 30 Ago. (Reuters/EP) -

Los dos empleados de la Embajada de Estados Unidos en México que el pasado viernes fueron atacados por un grupo de policías federales en la localidad de Tres Marías (centro) son agentes de la CIA, según han informado fuentes de seguridad a la agencia de noticias Reuters.

Al parecer, los agentes estadounidenses se encontraban en el país iberoamericano para participar en una misión de entrenamiento. En el momento del ataque, los empleados de la CIA se dirigían a una base militar, acompañados por un capitán de la Marina de México.

Hasta ahora, se sabe que el vehículo con matrícula diplomática en el viajaban los agentes estadounidenses fue tiroteado por un grupo de policías federales que, en sus declaraciones ante la Fiscalía, han asegurado que confundieron a los funcionarios norteamericanos con criminales.

Sin embargo, testigos consultados por Reuters han apuntado que los atacantes eran hombres vestidos de civil que iban en vehículos sin identificar. "No teníamos ni idea de que fueran policías, parecían delincuentes", ha dicho una mujer, que asegura que intentaron arrinconar al coche estadounidense, en una maniobra típica de las bandas criminales.

En la misma línea, un funcionario mexicano, que ha hablado bajo condición de anonimato, ha revelado que los indicios apuntan a que el ataque lo llevaron a cabo policías corruptos en complicidad con grupos criminales. "No fue un accidente", ha sostenido.

A este respecto, ha señalado que los casquillos de bala encontrados en el escenario del ataque son de rifles de asalto AK-47, que no son utilizados por las fuerzas de seguridad pero sí por los cárteles, y que uno de los vehículos implicados en el tiroteo está relacionado con otros sucesos.

El fin de semana, la sede diplomática denunció, a través de un comunicado, que los funcionarios norteamericanos han sido víctimas de una "emboscada". Ayer, la fiscal general de México, Marisela Morales, admitió que ésta es una de las líneas de investigación.

De momento, doce policías federales han sido detenidos y se ha dictado una orden de arraigo de 40 días en su contra, por lo que no podrán salir del país en dicho plazo de tiempo. Morales ha explicado que, por ahora, no se les ha imputado ningún delito.

COOPERACIÓN BILATERAL

En este contexto, un funcionario estadounidense cercano al caso ha considerado que hay "un cúmulo de preguntas sin responder" que podría afectar a los futuros acuerdos de cooperación bilateral en materia de seguridad, fundamentales para México.

Este incidente se produce en un periodo de inestabilidad en la política mexicana, ya que el ganador de las elecciones presidenciales, Enrique Peña Nieto, que está a la espera de que se decida sobre la impugnación de los comicios, todavía no ha anunciado si mantendrá la estrategia de seguridad.

El presidente mexicano, Felipe Calderón, ha puesto en marcha una guerra contra el crimen organizado, con el asesoramiento y el apoyo logístico de Estados Unidos, que hasta la fecha se ha saldado con más de 55.000 muertes por los enfrentamientos entre uniformados y criminales y entre grupos rivales.

En los últimos tiempos se han producido varios incidentes con funcionarios estadounidenses. El año pasado, dos agentes de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos fueron atacados por supuestos miembros del cártel de Los Zetas en una carretera federal que conduce a la frontera común. Uno de ellos murió.