Actualizado 26/05/2015 21:31

Ministro asesor de la presidencia de Nicaragua reconoce "grandes retrasos en educación"

Ministro asesor de la presidencia de Nicaragua reconoce
Foto: REUTERS

MANAGUA, 26 May. (Notimérica) -

   El ministro asesor de la presidencia de Nicaragua en temas de Educación y Cultura, Miguel De Castilla, ha admitido en Corea del Sur que en su país hay "grandes retrasos en educación".

   De acuerdo con el diario 'La Prensa', es la primera vez que un funcionario de educación admite los problemas de cobertura y calidad que tiene Nicaragua.

   Las declaraciones del ministro tuvieron lugar en un encuentro del Foro Mundial de Educación realizado este mes en Incheon, Corea del Sur. En dicho acontecimiento, De Castilla quiso compartir sus impresiones con el coordinador del Consejo de Educación de Adultos para América Latina (Ceaal) en Nicaragua, Silvio Gutiérrez, que fueron retransmitidas por la Asociación Latinoamericana de Educación Radiofónica (Aler).

   "Tenemos deudas que cumplir en los próximos 15 años y es una oportunidad para refundar las metas educativas en la región. Los seis objetivos que van a ser aprobados -y han sido consensuados durante estos meses anteriores- son compromisos muy grandes para nuestros países, especialmente para países como Nicaragua donde tenemos grandes retrasos en Educación tanto en cuanto cobertura (y) más aún en cuanto a calidad", reconocía De Castilla.

   Teniendo en cuenta que sólo Cuba ha alcanzado las metas propuestas entre 2000 y 2015, el ministro se ha comprometido a cumplir los nuevos objetivos del programa 'Educación para Todos' (EPT), que deberán alcanzar todos los países de aquí al 2030.

LA EDUCACIÓN PARA TODOS (EPT)

   Se trata de "una iniciativa que constituye un compromiso mundial para dar educación básica de calidad a todos los niños, jóvenes y adultos", tal y como publica la página oficial de la UNESCO.

   En el Foro Mundial sobre la Educación (Dakar, 2000), 164 gobiernos se comprometieron a hacer realidad la EPT y definieron seis objetivos que debían alcanzarse antes de 2015. Los gobiernos, los organismos de desarrollo, la sociedad civil y el sector privado están colaborando para cumplir con los objetivos de la EPT, pero sólo Cuba los ha alcanzado.

   Los seis objetivos son:

1) Extender y mejorar la protección y educación integrales de la primera infancia, especialmente para los niños más vulnerables y desfavorecidos.

2) Velar por que antes del año 2015 todos los niños, y sobre todo los que se encuentran en situaciones difíciles, tengan acceso a una enseñanza primaria gratuita y obligatoria de buena calidad y la terminen.

3) Velar por que las necesidades de aprendizaje de todos los jóvenes y adultos se satisfagan mediante un acceso equitativo a un aprendizaje adecuado y a programas de preparación para la vida activa.

4) Aumentar de aquí al año 2015 el número de adultos alfabetizados en un 50 por ciento, en particular, tratándose de mujeres, y facilitar a todos los adultos un acceso equitativo a la educación básica y la educación permanente.

5) Suprimir las disparidades entre los géneros en la enseñanza primaria y secundaria de aquí al año 2005 y lograr antes del año 2015 la igualdad entre los géneros en relación con la educación, en particular garantizando a las jóvenes un acceso pleno y equitativo a una educación básica de buena calidad, así como un buen rendimiento.

6) Mejorar todos los aspectos cualitativos de la educación, garantizando los parámetros más elevados, para conseguir resultados de aprendizaje reconocidos y mensurables, especialmente en lectura, escritura, aritmética y competencias prácticas.

SOLO CUBA HA ALCANZADO LAS METAS 2000-2015

   Según De Castilla, "la mesa está servida" así como "las grandes tareas muy caras y muy costosas". "Los problemas han sido tan grandes que muy pocos países consiguieron alcanzar las metas finales de la EPT", de manera que Nicaragua se ha comprometido a incrementar los recursos para la educación hasta conseguir "el seis por ciento del Producto Interior Bruto (PIB)".

   Teniendo en cuenta que en la actualidad Nicaragua invierte el 2,4 por ciento del PIB en Educación, elevar dicha inversión al seis por ciento sin duda supone un reto para los próximos 15 años pero no es imposible, según ha señalado el investigador del Instituto de Estudios Estratégicos y Políticas Públicas (Ieepp), Adelmo Sandino, quien ha aseverado que incluso podrían llegar a ese porcentaje antes del plazo estipulado.