Actualizado 23/04/2007 19:04

Nicaragua.- Una organización nicaragüense alerta sobre las consecuencias del uso de productos químicos en la agricultura

El abuso de estos productos ha provocado la muerte de 1.420 trabajadores del sector azucarero en el último año, según sus datos


MADRID, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -

La Alianza de Protección a la Biodiversidad está llevando a cabo una campaña divulgativa en Nicaragua sobre los graves impactos sociales y ambientales que se producen en este país por el uso de productos agrotóxicos.

"El modelo agroexportador adoptado en Nicaragua se caracteriza por las elevadas cantidades de productos químicos que se utilizan en la producción, que no requieren mano de obra calificada. A partir de los años 60, se registró un aumento de la mortalidad sin que se conocieran las razones, y esta dramática situación se ha venido incrementando con el tiempo", relata un miembro del Centro de Información y Servicios de Asesoría en Salud (CISAS), Denis Meléndez.

"En los últimos años, y principalmente en la zona occidental de Nicaragua donde se concentran las producciones agroexportadoras, hemos comenzado a darnos cuenta de los estragos que deja el uso indiscriminado de agrotóxicos", revela Meléndez.

En este sentido, la Alianza de Protección a la Biodiversidad menciona el caso de ex trabajadores azucareros afectados por Insuficiencia Renal Crónica (IRC) y "el silencio oficial" existente al respecto, a pesar de que se han producido 2.427 fallecimientos. Sólo en el último año, el número de fallecidos alcanzó las 1.420 personas, con un promedio mensual de 59 fallecimientos.

Meléndez afirma que, "si revisamos las cifras de incidencia, veremos que la IRC es una realidad que está diezmando a la población". "Es una situación que debería llamar poderosamente la atención de las autoridades --principalmente del ministerio de Agricultura (MAGFOR)--, que tendrían que adoptar medidas de inmediato en los territorios donde se registran infecciones", denunció.

El experto lamenta que Nicaragua, al igual que otros países centroamericanos, tardara en detectar el origen de la IRC "porque la gente no sabía de qué se estaba muriendo, las organizaciones no tenían la capacidad para percatarse de lo que estaba ocurriendo, y también porque los médicos atendían a las personas como si fuera una enfermedad común".

"Jamás registraban en el expediente clínico o laboral la información que pudiera establecer el vínculo entre el trabajo y la enfermedad que estaba padeciendo el trabajador", añadió Meléndez que recordó que ni con la aprobación de la Ley 456 --relativa a la Adición de Riesgos y Enfermedades Profesionales-- "las autoridades han asumido responsablemente todas las secuelas de esta enfermedad". "La gente sigue consumiendo agua y no sabe que está contaminada", sentenció.

"LAS EMPRESAS DEBEN RESPONDER"

Ante estos problemas, la Alianza de Protección a la Biodiversidad ha remitido un comunicado al Gobierno de Nicaragua en el que demanda a las autoridades sanitarias, laborales y sociales que atiendan "con carácter de emergencia esta situación".

"La empresa o empresas implicadas en estos casos de IRC deben responder por los daños causados a los trabajadores y a las familias de éstos, por las condiciones de vida y por exposición de daños en su salud" indica la Alianza en su comunicado, en el que demanda a las autoridades "adoptar medidas para la tutela correcta de la legislación vigente en la materia".

"Se deben reactivar los mecanismos que establece el marco regulatorio para la atención inmediata de la situación que se deriva del uso intenso e indiscriminado de los agrotóxicos sintéticos, y se estimulen prácticas de producción que se correspondan con un ambiente sano", concluye el comunicado, recogido por la web de 'Ecoportal'.

Por otro lado, la Alianza también alerta sobre las consecuencias del nuevo modelo de producción de biocombustibles implantado en Nicaragua, "pensado para alimentar a los vehículos y no para satisfacer las necesidades de las personas".

"Se cultiva maíz destinado a producir etanol, mientras el precio de la tortilla --elemento básico de la alimentación nacional-- se ha disparado en todo el país. También la palma aceitera está compitiendo con las personas para el aprovechamiento de las fuentes de agua subterráneas, y es un modelo de producción que va a agudizar la escasez de agua", advierten.