Actualizado 19/08/2009 21:16

Nuevos desafíos en India ponen reformas en suspenso

Por Krittivas Mukherjee

NUEVA DELHI (Reuters/EP) - Alza de los precios de los alimentos, gripe porcina, una guerra empresarial y hasta un contratiempo diplomático con el rival Pakistán son algunos de los problemas que enfrenta el Gobierno de India.

Con tres meses en el poder, la coalición gobernante de India está asediada de problemas que interrumpieron el impulso obtenido luego de una sólida victoria electoral y están dificultando el cumplimiento de fuertes promesas de cambio político y reforma económica.

"El Gobierno está a la defensiva. Sus prioridades tienen que virar para brindar alivio luego de la sequía y el alza de los precios de la comida", dijo V.K. Sharma, jefe de investigación de Anagram Stock Broking.

"En esta situación, el diseño de políticas puede quedar en segundo plano y cualquier gasto para compensar al sector agrícola por la sequía ampliará el déficit (fiscal). Todas las ideas sobre un claro mandato electoral que daría al Gobierno una mayor libertad se han silenciado", apuntó.

Muchos inversores, sin embargo, siguen siendo optimistas en el largo plazo y confían en que India finalmente va a aplicar medidas que abrirán los sectores de seguros, bancario y minorista a operadores internacionales, además de reformas laborales para ayudar a las compañías.

El Partido del Congreso, que encabeza la coalición de Gobierno, volvió al poder por un segundo mandato por un margen mayor al esperado en mayo, liberándose de los comunistas, que hundieron varias reformas a cambio de su apoyo al último Gobierno.

Hay señales de nuevas iniciativas. El Gobierno ha lanzado medidas políticas claves como planes para aplicar un nuevo código impositivo que podría reducir los impuestos de las compañías, una ley de seguridad de los alimentos y promesas de garantizar la escuela primaria gratuita para todos.

Pero varios desafíos han frenado el impulso del nuevo Gobierno.

Los más notables son la débil temporada monzónica, que muchos consideran como una sequía.

Otros incluyen una acusación contra el primer ministro Manmohan Singh, que el mes pasado fue criticado por ceder demasiado ante Pakistán en un comunicado conjunto sobre la lucha contra la militancia. Y el brote de gripe porcina, que provocó el cierre de escuelas y cines en la capital financiera Mumbai.

"Lo que podemos esperar es que el Gobierno actúe sin rumbo fijo mientras persistan las crisis y no fije plazos para sus acciones", dijo D.H. Pai Panandikar, jefe del grupo de estudio privado RPG Foundation.