Actualizado 17/12/2013 22:27

El Papa insta a reconocer la libertad religiosa y pide respeto para ateos

El Papa saluda en la plaza del San Pedro, en el Vaticano
REUTERS

ROMA, 28 Nov. (EUROPA PRESS) -

El Papa Francisco ha instado a reconocer el derecho a la libertad religiosa "en todas sus dimensiones", al tiempo que ha resaltado la necesidad de que "todo se realice en el respeto de las creencias de los demás, incluso de aquellos que no creen".

Así lo ha indicado este jueves el Santo Padre durante la audiencia a la Asamblea Plenaria del Pontificio Consejo para el diálogo interreligioso, que se ha llevado a cabo en la Sala Clementina del Palacio Apostólico Vaticano.

Francisco ha criticado el diálogo entre las diversas tradiciones religiosas cuando se piensa que sólo es posible la convivencia ocultando la propia pertenencia religiosa, "encontrándose en una especie de espacio neutral, carente de referencias a la trascendencia".

En este sentido, entiende que "es imprescindible el reconocimiento del derecho fundamental a la libertad religiosa, en todas sus dimensiones", resaltando la necesidad de que "todo se realice en el respeto de las creencias de los demás, incluso de aquellos que no creen", pero con coraje y paciencia "para acercarse entre sí por lo que cada uno es".

En esta misma línea, Francisco ha citado su reciente Exhortación apostólica Evangelii Gaudium en la que afirma que "una actitud de apertura en la verdad y el amor debe prevalecer en el diálogo con los creyentes de las religiones no cristianas".

"A pesar de los diversos obstáculos y dificultades, especialmente el fundamentalismo de ambas partes", ha matizado, recordando al mismo tiempo que sólo hay una manera de superar los obstáculos y es el diálogo, marcado por la amistad y el respeto.

Además, el Papa ha precisado que "dialogar no significa renunciar a la propia identidad cuando se va al encuentro del otro, ni tampoco ceder a compromisos en la fe y la moral cristiana" sino que ha asegurado que "la verdadera apertura implica permanecer firmes en las propias convicciones más profundas, con una identidad clara y alegre".

De esta manera, se podrán comprender las razones de los demás y ser capaz de entablar relaciones humanas respetuosas para el crecimiento en la fraternidad que también ofrece enriquecimiento y testimonio.

El Pontífice ha destacado que "el diálogo interreligioso y la evangelización no se excluyen, sino que se alimentan mutuamente" y ha animado a no imponer nada, ni utilizar "ninguna estrategia solapada para atraer a los fieles" sino ha animado a dar "testimonio con alegría y sencillez" de lo que se cree y se es.

Sin embargo, ha advertido sobre una fraternidad fingida o de laboratorio, en el que cada uno deja a un lado lo que cree. En cambio los discípulos de Jesús, ha concluido, se deben esforzar por "superar el miedo, siempre dispuestos a dar el primer paso, sin desanimarse ante las dificultades e incomprensiones".