Actualizado 19/03/2016 21:56

Un partido de béisbol que cambiará la historia

Workers are seen at the Latinoamericano baseball stadium ahead of an exhibition
ENRIQUE DE LA OSA / REUTERS

LA HABANA, 19 Mar. (Notimérica) -

   El presidente estadounidense, Barack Obama, iniciará mañana domingo su histórica visita a Cuba, donde estará dos días para estabilizar las relaciones bilaterales que se iniciaron el pasado diciembre de 2014.

   El mandatario estadounidense llegará a Cuba acompañado de su esposa Michelle, sus hijas Malia y Sasha; los secretarios de Estado, John Kerry; de Comercio, Penny Pritzker; de Agricultura, Tom Vilsack, así como una delegación bipartidista del Congreso y hombres de negocios.

   A pesar de que el principal objetivo del viaje del mandatario estadounidense es la de validar el acercamiento del país norteamericano hacia la región, habrá un momento de la visita que quede en los libros de historia.

   Obama será el encargado de lanzar la primera bola durante el partido entre la selección de Cuba y el equipo de Grandes Ligas Tampa Bay Ra, un partido de béisbol que se disputará el día 22 y que acogerá el Estadio Latinoamericano de Béisbol en La Habana.

   El director del Equipo Cuba, Víctor Mesa, señaló en declaraciones al medio Caribbean News Digital que tienen posibilidades de "darle una buena faena" y "quizás hasta ganar".

   El partido tendrá buena parte de la atención de todo el viaje, pero esta no es la primera vez que un partido de beisbol hace de intermediario entre Estados Unidos y Cuba.

   El mandatario estadounidense estará, 27 años después, en el mismo escenario que acogió el primer partido entre un equipo estadounidese y uno cubano, y que contó con la presencia de Fidel Castro.

   Aquel encuentro, impulsado por el expresidente Bill Clinton como parte de su iniciativa para facilitar las comunicaciones entre Washington y La Habana, está considerado como el primer paso que logró dar la llamada "diplomacia del béisbol".

   La visita de los Orioles de Baltimore a La Habana en marzo de 1999 fue la primera visita de un equipo profesional de las Grandes Ligas de béisbol estadounidense a Cuba tras cuatro décadas de hostilidades.

   "Tuvimos la oportunidad de reunirnos con el comandante Fidel y él nos explicó toda la problemática que tenía este encuentro", aseguró a 'BBC Mundo' Enrique Díaz, refiriéndose al partido de los Orioles en 1999.

   "Sabíamos la gran importancia política que eso tenía, porque era la unión de Estados Unidos con Cuba", recordó Díaz, una de las estrellas del béisbol cubano, "pero lo primordial era el partido. Este hecho creo que marcó mi carrera deportiva", asegura.

   A partir de este próximo 22 de marzo, es probable que a raíz del acercamiento entre los dos países, que quedará marcado por la visita de un presidente estadounidense desde 1928, sea más posible que los jugadores cubanos de este deporte puedan jugar en las ligas mayores sin la necesidad de desertar.