Actualizado 26/02/2008 22:16

Perú.-El ex presidente Alberto Fujimori merece una condena de 10 años por secuestro de dos personas, según la Fiscalía

LIMA, 26 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Fiscal Supremo de Perú, José Peláez Bardales, consideró hoy que el ex presidente de Perú Alberto Fujimori debería recibir una condena de al menos diez años por ordenar los secuestros del periodista Gustavo Gorriti y del empresario Samuel Dyer tras el golpe de Estado del 5 de abril de 1992.

Está "fehacientemente" probada la responsabilidad del ex presidente tras los testimonios escuchados y las pruebas documentales presentadas en la Sala Penal Especial que juzga a Fujimori, sostuvo Peláez Bardales.

"El material probatorio ha demostrado fehacientemente que sí se produjo el secuestro. Este delito está penado con un mínimo de diez años y pienso que no existe ninguna duda para que la Sala" le condene, añadió.

El máximo fiscal peruano explicó que Fujimori participó activamente en los secuestros del periodista y del empresario a manos de las Fuerzas Armadas y negó rotundamente que éstos fueran detenidos de forma arbitraria tal y como sostiene la defensa del ex presidente para tratar de obtener una pena menor.

Según informa la agencia de noticias peruana Andina, Gorriti fue secuestrado la madrugada del 6 de abril del 1992. Le llevaron a la Comandancia General del Ejército, donde fue encerrado en el sótano del Servicio de Inteligencia del Ejército (SIE), según la acusación.

El periodista declaró que en 2001 entrevistó en prisión al ex jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas Nicolás de Bari Hermoza Ríos, quien le habría confesado que fue obligado a firmar órdenes de detención para ser ejecutadas durante el autogolpe contra los opositores al Gobierno de la época.

Por su parte, el empresario Dyer Ampudia, fue secuestrado el 27 de julio de 1992 en el aeropuerto Jorge Chávez, cuando se disponía a viajar a Estados Unidos.

Dyer declaró durante el juicio que tras su detención, que se produjo sin orden judicial alguna, fue trasladado a la sede del 'Pentagonito', donde fue encerrado en un calabozo del Servicio de Inteligencia del Ejército (SIE), donde permaneció encerrado durante diez días. Añadió que en una de las ocasiones en que le llevaban al comedor vio al ex presidente Fujimori en uno de los pasadizos.

"Cuando lo vi le dije algo así: 'Presidente, estoy secuestrado, ayúdeme'. Pero no me consta que él me haya escuchado o que volteó a mirarme", concluyó.