Actualizado 31/07/2008 20:19

Perú.- La FAO suministra antibióticos y antiparsitarios a más de 18.000 alpacas afectadas por la ola de frío

ROMA, 31 Jul. (EUROPA PRESS) -

El Fondo de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) de Perú, a través de su Unidad de Emergencias y con fondos del Gobierno de Bélgica, suministró 36.800 dosis de antiparasitarios y antibióticos a más de 18.000 alpacas en Huancavelica, en el oeste del país. Estos camélidos andinos están enfermos y débiles debido a los efectos de las bajas temperaturas y las heladas registradas durante esta época en Perú.

Según la FAO, el cambio climático adelantó la época fría a los meses de marzo y abril, lo que ha afectado seriamente a los cultivos y a los pastos con los que se alimentan las llamas y las alpacas. La situación llevó al Gobierno a declarar el estado de emergencia en 11 regiones de las 25 que componen Perú.

"Los daños que ocasiona la época fría son devastadores para los pequeños agricultores y alpaqueros de las zonas altas de los Andes, quienes ven cómo la nieve y las heladas queman los pastos. Esto provoca que los camélidos andinos queden sin alimento durante varios días, debilitándose y volviéndose más proclives a las enfermedades", según informó el coordinador de emergencias de la FAO en Perú, Marc Vandersmissen.

Las más de 36.000 dosis de antiparasitarios, vitaminas y antibióticos han sido suministradas por expertos de la FAO en colaboración con los técnicos del Servicio Nacional de Sanidad Agraria (SENASA) y las direcciones regionales de agricultura. Los camélidos beneficiados pertenecen a pequeños ganaderos que habitan las zonas alto andinas y que no tienen otro modo de vida que la cría de alpacas y ovejas, indicó la FAO.

El propio Fondo de Naciones Unidas quiso recordar que las zonas altas de los Andes son las más pobres y las más vulnerables a contraer enfermedades de todo el país, y que "a partir de los 3.800 metros de altitud, las comunidades dependen de sus alpacas y de los pastos naturales que las alimentan". La destrucción de los pastos como consecuencia del frío, "significa la muerte para muchos animales y por ende, la destrucción de los medios de vida de los más pobres" añadió la FAO.