Actualizado 29/08/2007 13:27

Perú.- Oxfam Internacional inicia una segunda etapa de ayuda humanitaria en las zonas rurales que rodean Pisco

Su principal preocupación es el agua potable y el saneamiento, "cruciales" para prevenir brotes de enfermedades infecciosas


MADRID, 29 Ago. (EUROPA PRESS) -

Tras una evaluación detallada de la emergencia y de realizar una primera distribución de ayuda urgente a las víctimas del terremoto en Perú, Oxfam Internacional (Intermón Oxfam en España) ha iniciado esta semana una nueva etapa en su respuesta humanitaria en las zonas rurales que rodean a Pisco, gravemente afectadas por la catástrofe.

La ayuda incluye el suministro de agua potable, servicios de saneamiento, tiendas de campaña y plásticos para un total de 1.500 familias cuyas viviendas resultaron gravemente dañadas o destruidas tras el fuerte terremoto que sacudió el sur del país el pasado 15 de agosto.

Este martes, Oxfam inició la instalación de 20 tanques de agua que proveerán de agua potable inicialmente a 1.500 personas en los distritos rurales de Humay e Independencia. Además, está aportando un camión cisterna que llena los tanques con un total de 19.000 litros de agua diarios.

Esta nueva etapa en la respuesta se suma a la distribución la semana pasada de 350.000 litros de agua potable en las áreas urbanas afectadas, así como 2.500 mantas a familias del sector rural, para ayudarlas a hacer frente a un invierno inusualmente frío, según precisó la ONG en un comunicado.

"Nuestra principal preocupación en este momento es el agua potable y el saneamiento porque estos dos elementos son absolutamente cruciales para prevenir brotes de enfermedades infecciosas", explicó Jacobo Ocharán, coordinador de Oxfam Internacional para la respuesta a la emergencia.

Así, precisño que ahora la población de Humay e Independencia, que ayudaron a instalar los tanques de agua, tienen acceso a agua que es incluso más limpia que la que tenían antes del terremoto. "En las próximas semanas los entrenaremos en métodos para mantener el agua potable", añadió.

En los distritos rurales de Humay e Independencia, situados a 30 y 12 kilómetros de Pisco, Oxfam Internacional está también cubriendo necesidades básicas de cobijo, ya que muchas de las casas destruidas están situadas en terrenos con espacio suficiente para levantar una tienda de campaña familiar.

El resto de las familias están levantando sus refugios temporales en pequeños campos de 10 a 40 tiendas de campaña en áreas abiertas cerca de sus casas originales. Al proveer refugio temporal individual para familias, Oxfam Internacional intenta facilitar que los habitantes permanezcan en su propia tierra.

"Estamos tratando de colocar las tiendas en lugares familiares cercanos a sus casas para contribuir a que los residentes se sientan menos vulnerables. Esto contribuye a una más fácil reconstrucción de sus hogares, lo cual es importante porque no queremos que los albergues temporales se conviertan en sus casas permanentes", añadió.

Aunque hay grandes avances en la distribución de ayuda en las dos semanas transcurridas desde el terremoto todavía "queda mucho trabajo por hacer", indicó Oxfam, que está trabajando en coordinación con otras organizaciones internacionales, el Gobierno para garantizar que la ayuda se distribuya a quienes más la necesitan.

"Los cooperantes de Oxfam Internacional están ayudando a las autoridades y líderes locales a evaluar los daños y las necesidades de las familias afectadas por el terremoto. Esta es la única forma de garantizar que la ayuda sea distribuida a quienes realmente la necesitan, y que esta distribución sea equitativa y justa", declaró.

"Tratamos de seguir fortaleciendo la participación de los residentes en la ayuda y rehabilitación de sus propias comunidades. Sabemos por nuestra experiencia que cuando las comunidades están involucradas y bien organizadas los esfuerzos de ayuda humanitaria y reconstrucción tienen mejores posibilidades de éxito", concluyó.