Publicado 09/06/2016 21:15

Rafael Correa se compromete a poner fin a la era de los paraísos fiscales

Rafael Correa
PRESIDENCIA GOBIERNO DE ECUADOR

   QUITO, 9 Jun. (Notimérica) -

   El presidente de Ecuador, Rafael Correa, ha firmado una carta coordinada por la organización no gubernamental Oxfam apelando a los líderes mundiales para acabar con los paraísos fiscales.

   El mandatario ecuatoriano ha manifestado su compromiso y ha solicitado la creación de una institución mundial que acabe con los paraísos fiscales y la opacidad financiera que protege a sus usuarios.

   "Vamos a solicitar que se incluya este tema fundamental en la agenda de la Asamblea General de las Naciones Unidas. Coordinaremos con los países del G77 para prohibir los paraísos fiscales", ha declarado Correa.

   Además, este miércoles, en una entrevista, señaló que se está analizando la posibilidad de inhabilitar a los candidatos o funcionarios públicos de Ecuador que tengan empresas o capitales en paraísos fiscales, según ha informado la agencia de noticias estatal 'Andes'.

   "Ahí estaremos a la vanguardia del mundo porque todo el mundo habla de los paraísos fiscales, pero como están dominados por el poder, por el capital financiero, no hacen nada en lo concreto", expresó Correa, que podría exponer esta iniciativa en la consulta popular que tendrá lugar en febrero de 2017, cuando se celebren elecciones presidenciales.

   Por su parte, Rosa Cañete, coordinadora de la campaña 'Iguales' de Oxfam en América Latina y el Caribe, ha señalado que "32 millones de personas saldrían de la pobreza si los capitales de los residentes latinoamericanos escondidos en paraísos fiscales pagan el impuesto sobre la renta que les corresponde. Esto equivale a todas las personas pobres de Bolivia, Colombia, El Salvador y Perú".

   Asimismo, otros académicos han firmado este documento, y economistas internacionales han hecho un llamamiento a los gobiernos para que tomen medidas que obliguen a las empresas a publicar informes sobre sus actividades en los países donde operan.

   La organización también ha querido exhortar a los gobiernos iberoamericanos para que exijan a las grandes empresas que paguen sus impuestos allí donde se desarrolla su actividad, impidiendo así la fuga de capitales.