Actualizado 08/12/2010 23:24

Rebajan a 81 la cifra de fallecidos por el incendio en una cárcel chilena

CHILE-PRISON/ Incendio en una cárcel de Chile
VICTOR RUIZ CABALLERO / REUTERS


SANTIAGO, 8 Dic. (EUROPA PRESS) -

Las autoridades chilenas confirmaron que son 81 y no 83 los muertos por el incendio que tuvo lugar este miércoles en la prisión de San Miguel, en Santiago, como consecuencia de una reyerta entre los reclusos.

El director Nacional de Gendarmería, Luis Masferrer, explicó a los medios que "se produjo una confusión" en las informaciones suministradas por los centros de salud donde fueron ingresados los reos que resultaron heridos en el siniestro.

El mandatario chileno, Sebastián Piñera, había anunciado horas antes que el número de víctimas mortales había ascendido a 83, tras la muertes de otras dos personas que en un comienzo se creía que eran presos.

A pesar de esta confusión las autoridades se mantienen en alerta pues no se descarta que la cifra de fallecidos aumente, debido a que otros 14 reclusos se encuentran ingresados en estado "muy grave", según Masferrer. Los otros reos que sufrieron lesiones se encuentran fuera de peligro, aunque permanecerán en observación.

Peritos de la Policía han identificado hasta el momento a 31 cadáveres, según informó a la prensa el jefe de la Brigada de Homicidios, Luis Sandoval. Todavía restan por reconocer a 50 víctimas que quedarán a cargo del Servicio Médico Legal de Santiago.

El incendio pudo haber sido provocado en medio de un enfrentamiento entre reclusos del tercer piso de la torre cinco de la penitenciaría, según la hipótesis que barajan las autoridades.

Pero uno de los presos que fue testigo de lo ocurrido reveló a la emisora Cooperativa que las llamas no fueron provocadas por los propios reos sino por problemas en las instalaciones de la cárcel de San Miguel.

"Acá hay varios funcionarios que han llamado (a los medios de comunicación) haciéndose pasar por internos diciendo que esto fue una riña y eso no fue así. Esto fue por las instalaciones (eléctricas) mal hechas", afirmó el interno que no fue identificado.

Piñera reconoció este miércoles que el sistema carcelario en Chile es "absolutamente inhumano" y que, dadas sus decadentes condiciones, "no resiste más". El pasado 15 de octubre el Gobierno puso en marcha un "completo plan para modernizar" la estructura carcelaria que prevé la construcción de tres prisiones y el desarrollo de planes para mejorar las condiciones de los reclusos.

La población penitenciaria de Chile es de unos 108.000 internos, pero la mayoría viven hacinados en edificaciones que están en condiciones precarias. Piñera afirmó que el sistema carcelario "no solamente es inhumano" sino que además "es un atentado a la calidad de vida y a la dignidad de todo el país".

El problema de las prisiones en esa nación sudamericana es algo que "se arrastra ya desde hace mucho, mucho tiempo", acotó el mandatario, quien considera que la "tragedia" de los 83 reclusos en Santiago debe "ayudar a corregir el rumbo" en esa materia.