MONTEVIDEO, 25 Ago. (EUROPA PRESS) -
El ministro uruguayo de Agricultura, Ganadería y Pesca (MGAP), José Mujica, y el representante del Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente (MVOTMA), Mariano Arana, aprobaron el pasado 17 de agosto suspender el uso, producción y comercialización de semilla de maíz dulce genéticamente modificado.
Esta decisión ha sido tomada después de que ambos Ministerios decidiesen que la agricultura familiar basada en la horticultura, modo tradicional de cultivo del país, era muy vulnerable. Además, la resolución establece que se sancionará mediante la aplicación de multas a todos aquellos que incumplan esta nueva normativa.
A principios de este año, la Dirección Nacional de Medio Ambiente (DINAMA) recibió una denuncia por parte de la Red de Acción en Plaguicidas para América Latina (RAP-AL) en la que se aseguraba que en Montevideo se estaba vendiendo maíz dulce transgénico sin el debido etiquetado y sin que se cumplieran los procedimientos necesarios para hacer un seguimiento de las semillas.
Después de este aviso, la DINAMA realizó una inspección de forma inmediata, donde pudo comprobar la veracidad de la denuncia recibida, por lo que inició un expediente administrativo contra la empresa comercializadora.
Por otro lado, el consumo de este tipo de semilla no es muy común en este país y un ejemplo de ello podría ser que la cantidad total de este producto importado el pasado año para todo el territorio uruguayo no llegó a superar las dos toneladas.