Actualizado 15/09/2011 18:51

Presos de la cárcel de El Rodeo cumplen tres días en huelga de hambre para exigir el cese de los maltratos


CARACAS, 15 Sep. (EUROPA PRESS) -

Los presos de la cárcel venezolana de El Rodeo --a unos 30 kilómetros de Caracas-- cumplen este jueves tres días en huelga de hambre para exigir el cese de los maltratos por parte de los guardias de seguridad, en una nueva protesta que amenaza con hacer estallar otra crisis similar a la que mantuvo secuestrados a cientos de reos los pasados junio y julio.

Más de 750 internos de El Rodeo III comenzaron el martes un ayuno indefinido para denunciar los supuestos abusos físicos de los militares que custodian el recinto. Según sus familiares, la situación ha empeorado desde la intervención el pasado junio de las cárceles vecinas (El Rodeo I y II).

Unos 930 reos de El Rodeo I se han sumado a esta huelga de hambre en apoyo a sus compañeros y, según informan algunos medios locales, en las próximas horas podrían adherirse a la protesta los presos de la segunda sección.

Presos de El Rodeo que fueron trasladados a otras prisiones de Venezuela tras el estallido de la crisis también han decidido apoyar sus compañeros, lo que suman alrededor de 4.000 internos en huelga de hambre en todo el país, de acuerdo a un cálculo del diario local 'El Universal'.

Los reclusos exigen principalmente que los uniformados pongan fin a las hostilidades y cesen los maltratos físicos y verbales. También piden que se les facilite el contacto con sus familiares instalando un teléfono público en cada pabellón, además de un televisor para poder estar informados de lo que sucede en el país.

Los presos piden al Ministerio del Interior de Venezuela y a las autoridades de la prisión reducir el tiempo de permanencia en las celdas y autorizar el libre desplazamiento por las zonas deportivas, así como la adecuación de algunos espacios para convertirlos en zonas de estudio y asistencia médica.

En el documento de peticiones --divulgado a través de los medios locales-- los internos piden al gobierno considerar la posibilidad de trasladar a algunos internos a las cárceles cercanas a su lugar de origen para que sus familiares no tengan que gastar tanto dinero en viajes.

La huelga de hambre se produce casi dos meses después de que la Guardia Nacional Bolivariana interviniera los edificios de El Rodeo I y II para poner fin al supuesto secuestro de cientos de reclusos que estaban en poder de dos líderes de mafias, conocidos como "pranes".

Unos cinco mil uniformados tomaron la prisión pero los enfrentamientos con las mafias se extendieron durante casi dos meses dejando más de una veintena de heridos, según cifras oficiales que difieren de los cálculos de los propios reos que hablan de más de un centenar de fallecidos.

Una vez controlada la situación, el Ministerio del Interior decidió trasladar de manera supuestamente temporal a unos 2.500 presos --entre ellos a los "pranes"-- a otros recintos carcelarios de Venezuela, con la intención de limpiar las instalaciones y hacer algunas reformas en los edificios. Sin embargo, los familiares denuncian que todavía es la fecha que no se les ha informado del retorno de los internos.

La crisis en El Rodeo --una de las peores que ha vivido el sistema penitenciario venezolano-- tomó por sorpresa al presidente Hugo Chávez, quien para ese entonces se encontraba en Cuba tratándose un tumor que resultó ser cancerígeno. En un intento de paliar la situación, ordenó crear un ministerio especial que se dedique a atender las cárceles y la problemática de los presos.

La diputada Iris Varela fue designada como titular del nuevo Ministerio del Sistema Penitenciario y una de sus primeras decisiones fue la excarcelación de unos 20.000 internos y suspender el ingreso de delincuentes a las prisiones, medida que ha sido duramente criticada en un país azotado por la criminalidad y la violencia.