Actualizado 28/07/2009 01:59

"Zona muerta" de EEUU es más pequeña y severa este año: Gobierno

Por Timothy Gardner

WASHINGTON (Reuters/EP) - La "zona muerta" en el Golfo de México, área de bajos niveles de oxígeno que amenaza la vida marina, es más pequeña de lo esperado este año, aunque más letal, informó el lunes el Gobierno.

La zona, causada por químicos agrícolas de granjas ubicadas junto al río Misisipi, mide cerca de 7.800 kilómetros o alrededor de 1,5 veces el tamaño del estado de Delaware, superficie menor a las estimaciones en torno a los 13.680 kilómetros, comentaron científicos.

"Claramente el flujo de exceso de nitrógeno y fósforo de campos agrícolas en la cuenca de drenaje continúa causando estragos a la vida en el Golfo", dijo a reporteros en una teleconferencia Jane Lubchenco, encargada de la Administración Nacional Océanica y Atmosférica de Estados Unidos.

Vientos inusualmente poderosos y corrientes agitaron las aguas, devolviéndole el oxígeno y reduciendo la zona a un tamaño menor del anticipado.

Sin embargo, Nancy Rabalais, científica de las Universidades de Luisiana Marine Consortium, dijo que la zona es más severa porque los bajos niveles de oxígeno están más cerca de la superficie que en años recientes.

La zona muerta amenaza a las industrias pesqueras del Golfo equivalentes a cerca de 3.000 millones de dólares al año.

Ahora animales marinos que normalmente se alimentan cerca del fondo marino, incluyendo anguilas y cierto tipo de camarones y cangrejos se hallan más cerca de la superficie.

La zona muerta es causada por fertilizantes y nutrientes como nitrógeno y fósforo usados en tierras de cultivo en los alrededores del Misisipi, que a su vez llevan a la sobreproducción de pequeños organismos como algas en el Golfo de México.

Si lo organismos no son devorados, mueren y caen al fondo del océano, donde bacterias las llevan a su putrefacción succionando el oxígeno del agua.

El tamaño promedio de la zona muerta durante los últimos cinco años ha sido de alrededor de 9.656 kilómetros cuadrados, equivalente a aproximadamente el tamaño del estado de Connecticut.

Agencias federales y estatales han trabajado juntas en el Golfo de México y en el río Misisipi desde el 2001 para controlar el crecimiento de la zona, buscando reducirla a cerca de 3.220 kilómetros cuadrados para el 2015.

Sin embargo, algunos indican que el progreso en el control del flujo ha sido lento.

"Realmente se ha hecho relativamente poco para implementar el plan de acción", comentó Donald Boesch, científico marino de la Universidad de Maryland. Además, precisó que los mandatos de Estados Unidos para más biocombustibles en base a granos contribuyen al flujo químico y al tamaño de la zona.

Por su parte, las compañías de biocombustibles aseguran que cada año están utilizando menos químicos para el cultivo de granos.

A diferencia de los esfuerzos realizados en otras regiones que tienen zonas muertas como la Bahía de Chesapeake y el mar Báltico, en la cuenca del Misisipi no se han establecido metas numéricas para reducir los nutrientes en áreas cercanas.

Un regulador medioambiental federal dijo que la agencia Mississippi River Watershed Nutrient Task Force se reunirá durante el otoño boreal en Iowa para discutir una nueva directriz e ideas para abordar el problema.