MADRID, 22 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Perú, Alan García, negó hoy en Madrid que su "amigo", el mandatario venezolano, Hugo Chávez, y el proyecto bolivariano que pretende "exportar" al resto de América Latina pueda convertirse en una amenaza para la región ya que, según dijo, esos "modos de pensar" están en franco "retroceso".
"Yo no veo (en Chávez) ninguna amenaza. Esos modos de pensar están en franco retroceso. No se puede oponer uno con las manos al mar o silbar contra el viento", afirmó el presidente peruano durante su intervención en un desayuno informativo con motivo de su visita oficial de dos días a España.
García, que empezó diciendo que quería ser "muy prudente" al hablar de su "amigo" Chávez, insistió en sus críticas al mandatario venezolano por "cerrar" su país a su "riqueza interna". "Cerrar un país en torno a su riqueza por grande que sea lo priva de recibir el impulso de la inversión y la tecnología internacional", indicó.
En este sentido, consideró que el avance de la tecnología, la fuerza de internet, el esfuerzo científico y la movilización de capitales por trillones de dólares no tiene "nada que ver" con el pequeño esfuerzo "de un gobernante de un pequeño país", en clara alusión a Chávez.
"El problema es que el título de presidente a veces convence a alguno que ser presidente es ser un hijo de Dios con capacidades taumatúrgicas y sobrehumanas y en el fondo, uno no es más que un ser humano como cualquiera, sujeto al contexto y a las imprudencias del mundo", añadió.
En este punto, aseguró que lo peor que puede hacer un gobernante es querer "exportar" sus ideas, aunque insistió en que Chávez y su proyecto bolivariano no son una amenaza para el resto de la región. "Las diferencias entre Venezuela y Perú se verán dentro de tres años en los resultados que hayan logrado ambas economías", indicó.
"Lo que nos queda es demostrar con resultados dentro de tres años qué modelo funciona. Yo me someto a los resultados y a las metas. No es a través del discursos como se hacen las cosas. Hay que demostrar con hechos, y no con palabras, las metas de un modelo", remachó el mandatario peruano.