Actualizado 22/07/2008 22:03

Venezuela.- El PP pide al Gobierno aprovechar el cambio de actitud de Chávez para tener un diálogo "crítico y exigente"


MADRID, 22 Jul. (EUROPA PRESS) -

El PP pidió hoy al Gobierno que aproveche el cambio de actitud demostrado por el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, en los últimos meses para inaugurar una etapa de diálogo "firme, crítico y exigente" entre Madrid y Caracas, con motivo de la visita que realizará este viernes a nuestro país.

"No impulsamos ni pedimos al Gobierno una ruptura de relaciones diplomáticas, ni que haya tensión o confrontación, sino un compromiso firme y claro con los valores que son comunes a todos los seres humanos", afirmó a Europa Press el portavoz del PP en la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso, Gustavo de Arístegui.

Así, confió en que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero aproveche el cambio de actitud de Hugo Chávez para mantener el diálogo "firme, crítico y exigente" que un gobierno democrático tiene que mantener con un gobierno "con un régimen que están en deriva autoritaria".

De Arístegui atribuyó ese cambio de actitud a la información aparecida en los ordenadores del número dos de las FARC, Raúl Reyes, que murió el pasado 1 de marzo, o al éxito militar del rescate de la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt y otros 14 rehenes el pasado 2 de julio.

Para el portavoz 'popular', con la información de esos ordenadores incautados durante la operación militar lanzada por el Ejército colombiano en territorio ecuatoriano quedaron de manifiesto las denuncias que hizo su partido sobre la "connivencia de Chávez con las FARC" y de las relaciones de ese grupo con la banda terrorista ETA.

"Desde entonces estamos viendo a un Hugo Chávez mucho más apocado y que está intentando romper la imagen de incondicional apoyo a las FARC", añadió De Arístegui, quien sin embargo advirtió que sigue siendo un "provocador", al referirse a sus últimas declaraciones antes de ver al Rey en el Palacio de Marivent este viernes.

Además, recordó que recientemente decidió cambiar el nombre de la Plaza de Colón de Caracas por la Plaza de la Resistencia Indígena, un "pequeño detalle" que, a su juicio, demuestra que "la retórica de confrontación no puede dejar de producirse para que el populismo siga manteniendo viva la llama de la demagogia y el efectismo".

Sobre el incidente con el Rey en Chile, confió que quede zanjado definitivamente con esta visita, aunque volvió a culpar al Gobierno por lo ocurrido. "Si (el ministro de Exteriores, Miguel Angel) Moratinos o el presidente hubieran cortado de raíz los primeros comentarios no se habría producido ese gravísimo incidente", indicó.

Por otro lado, consideró necesario que el Gobierno socialista se dé cuenta de que incluso dentro del propio chavismo empieza a haber una "contestación creciente" por una serie de leyes que suponían, según dijo, una "restricción intolerable" de los derechos y de las libertades fundamentales de los venezolanos.

"España tiene que mantener una posición de defensa muy clara de los principios y valores de la democracia, y de las libertades y los derechos de los latinoamericanos. Cuando se produce cualquier tipo de desviación, sea de una corriente u otra, España tiene que estar comprometida con la libertad", sentenció.