Actualizado 22/05/2014 22:43

En Venezuela sólo se castigan seis de cada 100 delitos

Disturbios en San Cristobal, Venezuela
Foto: REUTERS

CARACAS, 22 May. (Notimex/EP) -

   El abogado y experto en criminalística Fermín Mármol García, hijo del ex ministro de Interior de Venezuela Fermín Mármol León, ha indicado que en Venezuela sólo se castigan seis de cada 100 delitos que se cometen y que esto "explica el alto grado de impunidad que existe en el país".

   Mármol García, catedrático en la Universidad Santa María de Venezuela, ha indicado que la impunidad se debe a que las instituciones del sistema de seguridad son muy débiles y ha advertido de que hay un "déficit de policías uniformados en verdaderas y exclusivas labores de patrullaje".

   "Por otra parte el déficit en el tema tecnológico es grave, ya que hacen falta laboratorios científicos y morgues con personal debidamente capacitado en la elaboración de protocolos de autopsia que ayuden al esclarecimiento de los hechos criminales", ha resaltado el experto.

   El abogado ha recordado que el tema de la inseguridad sigue siendo el principal problema de los venezolanos, según las encuestas, y ha indicado que aunque el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, haya prometido garantizar la seguridad, todavía se gasta más en presupuesto militar.

VENEZUELA Y LA VIOLENCIA

   El presidente Nicolás Maduro reconoció por primera vez el pasado mes de enero que "la deuda (del Gobierno) con el pueblo en crear un esquema de seguridad pública" y emprendió una nueva campaña para "pacificar el país".

   Según las cifras del Gobierno, en 2013 había 39 homicidios por cada 100.000 habitantes, lo que convierte a Venezuela en un país más violento que Colombia y México. Sin embargo, el Observatorio Venezolano de Violencia (OVV) estima que hubo 79 muertos por cada 100.000 habitantes el año pasado.

   La ola de protestas que sacude Venezuela desde el pasado 12 de febrero y que ya ha dejado 41 muertos, comenzó originalmente como una serie de protestas contra la inseguridad ciudadana.