Actualizado 25/01/2014 00:48

ACTUALIZA 7-Argentina relaja control de cambios tras derrumbe del peso

(Actualiza con intervención de banco central)

Por Alejandro Lifschitz y Walter Bianchi

BUENOS AIRES, 24 ene, 25 Ene. (Reuters/EP) -

- El Gobierno argentino decidió flexibilizar el viernes un estricto control de cambios que venía defendiendo a rajatabla, presionado por el desplome de la moneda local, una galopante inflación y la constante caída de sus reservas internacionales.

Sorprendiendo a los argentinos y a los inversores, la administración de la presidenta peronista Cristina Fernández dijo que tomó la medida porque el peso cayó a niveles que considera de "equilibrio". Pero políticos opositores y economistas opinaron que el cambio de estrategia muestra una desorientación del equipo económico ante la crisis cambiaria.

Desde el lunes se levantará la prohibición para la compra de dólares para ahorro y se reducirá del 35 al por 20 ciento el impuesto que los argentinos deben pagar para adquirirlos.

La medida puede profundizar la debilidad de la moneda, alimentando la ya alta inflación y generando malestar social justo cuando se inician las negociaciones salariales anuales.

Pero el ministro de Economía, Axel Kicillof, aseguró que el Gobierno no permitirá una mayor devaluación del peso.

"Nosotros lo que hicimos ayer (jueves) es que vimos que había una fuerte intención de generar una devaluación, que el mercado estaba con ese ánimo y nosotros no vamos a permitir que eso ocurra", dijo Kicillof en una entrevista radial, aludiendo a un supuesto complot del mercado para desestabilizar al Gobierno.

La moneda cerró con una leve baja del 0,06 por ciento a 8,005 tras haber llegado a caer hasta a 8,120, acumulando una pérdida superior al 20 por ciento este año. El jueves se había derrumbado un 11 por ciento, su mayor caída en casi 12 años.

Los bonos argentinos también perdieron terreno, disparando el riesgo país argentino por encima de los 1.000 puntos básicos medidos por el índice EMBI+ del banco JP Morgan, el mayor nivel en esa lista de países emergentes.

POCOS DOLARES

Los economistas aseguran que no hay suficientes dólares para saciar el apetito de los ahorristas argentinos, que por décadas se han refugiado en el billete verde contra la volatilidad de la economía local.

Los dólares son escasos en Argentina por la debilidad de sus exportaciones, un pobre nivel de inversión externa ante la desconfianza en su economía y por la falta de acceso a los mercados de crédito internacional desde su enorme cesación de pagos del 2002.

De todas maneras, los argentinos deberán seguir pidiendo autorización a la agencia impositiva antes de adquirir divisas, lo que puede ser utilizado por el Gobierno como un filtro para frenar la demanda y evitar una corrida sobre el dólar.

"Esta decisión obedece a que en el marco de la política cambiaria de flotación administrada del tipo de cambio el Gobierno considera que el precio de la divisa, es decir del dólar, ha alcanzado un nivel de convergencia aceptable para los objetivos de la política económica", dijo el viernes el jefe de Gabinete de Ministros, Jorge Capitanich, al anunciar la medida.

La devaluación del peso sorprendió al mercado, luego que el Banco Central interviniera a diario durante años para evitar bruscas oscilaciones de la moneda argentina por temor a acelerar la ya elevada inflación.

"De acuerdo a como está el mercado hoy es imposible que el Gobierno o el Banco Central libere el cepo cambiario porque hoy la demanda de dólares supera ampliamente a la oferta y las reservas están en caída", dijo el ex presidente del Banco Central, Aldo Pignanelli.

"Lo de hoy es 'marketinero'. El Gobierno ha perdido la iniciativa en las últimas 48 horas. Este anuncio fue para calmar los ánimos", agregó.

En Argentina, los valores de una gran cantidad de bienes y servicios tradicionalmente se ajustan a las variaciones del tipo de cambio del peso contra el dólar, por lo que una depreciación cambiaria se traduce en presiones inflacionarias.

Desde la noche del jueves las empresas de electrodomésticos -que importan la mayoría de sus componentes- comenzaron a subir los precios de sus productos, al algunos casos más del 20 por ciento, y eliminaron la posibilidad de compras en cuotas.

En tanto, las automotrices frenaron el viernes la venta de vehículos nacionales e importados para evaluar la situación, según fuentes del sector.

En el mercado negro, el peso se recuperó el viernes un 11,97 por ciento a 11,70 unidades por dólar en una jornada con escasos negocios.

¿BUSCANDO EL EQUILIBRIO?

El gobierno de Fernández había impuesto a fines del 2011 el férreo control de cambios para frenar una fuga de capitales, una medida que incluyó la prohibición de la compra de dólares para atesoramiento.

Pero las restricciones no evitaron que las reservas del Banco Central se desplomaran más de un 30 por ciento desde inicios del 2013 y generaron incertidumbres que terminaron debilitando a la economía.

El viernes, la entidad tuvo que volcar en el mercado cambiario 160 millones de dólares para evitar una mayor devaluación. La autoridad monetaria dijo el viernes que sus reservas perdieron 200 millones frente al día previo, para culminar la semana en 29.063 millones de dólares, su menor nivel desde inicios de noviembre del 2006.

El nivel de divisas en el Banco Central es crítico para el Gobierno, que las utiliza para honrar sus deudas en moneda extranjera.

Las medidas de control de cambios habían disparado también una fuerte caída del peso en el mercado negro, poniendo presión sobre los precios en un país con una de las mayores inflaciones del mundo, que llegó al 25 por ciento el año pasado según cálculos privados.

"Hay un gran marco de improvisación (en el Gobierno). Creerá el Gobierno que el tipo de cambio con el que se cerró ayer es de equilibrio", dijo el economista Carlos Melconian.