Actualizado 06/02/2014 23:12

Abuelas de la Plaza de Mayo hallan a la nieta 110

BUENOS AIRES, 6 Feb. (EUROPA PRESS) -

   Las Abuelas de la Plaza de Mayo han encontrado a la nieta número 110, hija de Liliana Acuña y Óscar Gutiérrez, militantes de Montoneros, que fueron secuestrados en Buenos Aires durante la última dictadura militar argentina y que todavía siguen desaparecidos.

   "Las Abuelas de Plaza de Mayo tenemos la enorme alegría de informar de que hemos encontrado a la hija de Óscar Rómulo Gutiérrez y Liliana Isabel Acuña, desaparecidos el 26 de agosto de 1976", han anunciado en un comunicado.

   El matrimonio fue secuestrado a las 6.30 (hora local) en su domicilio de la localidad de San Justo, en el partido bonaerense de La Matanza, por "doce hombres vestidos de civil que portaban armas largas e irrumpieron bajo amenazas de muerte".

   Gutiérrez y Acuña, entonces embarazada de cinco meses, fueron trasladados a la Cuarta Comisaría del partido de San Isidro, denominada Las Barrancas, "provenientes de otro sitio y con evidentes signos de haber sido torturados".

   "La pareja fue alojada junto a otras doce personas en un sector especial con acceso restringido al personal policial. Dependían directamente del Área 420 del Ejército Argentino, bajo jurisdicción de la Escuela de Comunicaciones de Campo de Mayo", han detallado.

   A través de un agente de Las Barrancas, "los familiares pudieron saber que estaban con vida, aunque en pésimas condiciones, y que el embarazo seguía adelante". "También les contó, tiempo después, que Liliana había dado a luz a una nena", han añadido.

   Cuando Las Barrancas se dio cuenta de que este agente estaba en contacto con las familias de los detenidos, éstos fueron trasladados, "junto al resto de sus compañeros de cautiverio", a un lugar desconocido. "Toda la familia permanece desaparecida", han lamentado.

   El pasado 31 de octubre "una joven se acercó a Abuelas de Plaza de Mayo con dudas sobre su identidad" explicando que "quien figuraba como su madre en la partida de nacimiento le había contado que el 31 de diciembre de 1976 había sido entregada por personal de la Policía Bonaerense a quien figuraba como su padre, miembro de esa fuerza".

   "La historia que le narraban decía que había sido encontrada abandonada en la Ruta 2, en Florencio Varela, por policías que, como sabían que el matrimonio apropiador tenía otro hijo no biológico, le ofrecieron a la beba", han relatado.

   Tras su acercamiento a las Abuelas de la Plaza de Mayo, "la joven fue derivada a la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad (Conadi) y el Banco Nacional de Datos Genéticos (BNDG) hizo un análisis de ADN, confirmando que es hija de Gutiérrez y Acuña.

LAS ABUELAS

   La organización humanitaria ha lamentado que las abuelas biológicas, Vilma Delinda y Rosa González, no hayan podido conocer a su nieta después de su larga búsqueda, porque han fallecido en los últimos años.

   "Entre las innumerables gestiones que realizaron para intentar encontrar a sus familiares desaparecidos, llegaron a entrevistarse con el genocida Jorge Rafael Videla en Bolivia", han revelado.

   "Una vez más, a pesar del tiempo transcurrido y las huellas que intentaron borrar, la verdad triunfa sobre la mentira. Sin embargo, no deja de dolernos que Vilma y Rosa no hayan podido conocer a su nieta", han dicho.

   Las Abuelas de la Plaza de Mayo han señalado que "el tiempo corre, por lo que los familiares (de los desaparecidos) quisieran tener la posibilidad de abrazar a sus nietos y nietas, que desde hace más de 36 años están buscando".

   "Ya son hombres y mujeres y las Abuelas de la Plaza de Mayo deseamos con la urgencia del tiempo que corre que se animen a enfrentarse con su historia. Les ofrecemos certezas. Les repetimos que no están solos", han concluido.