Foto: EUROPA PRESS/TSJC
BUENOS AIRES, 11 Feb. (EUROPA PRESS) -
Que a veces la justicia llega un poco tarde es bien sabido. Pero en el caso de una mujer argentina que denunció a su marido por malos tratos, el retraso ha sido más que evidente.
Y es que la justicia sanjuanina citó a Cristina Olivares para que se presentara este lunes, 10 de febrero, a declarar por la denuncia que había interpuesto contra su marido por malos tratos, pero la citación llegó tarde, ya que la mujer fue asesinada el 7 de julio de 2012.
Cristina Olivares tenía 27 años cuando denunció a su marido por violencia de género en la capital de San Juan. Su final fue trágico: según la Justicia, su marido, Miguel Ángel Palma, de 28 años; la amante de éste, Rosa Videla (28) y la amiga de ellos, Noelia Corvalán (20), redujeron a Olivares a punta de cuchillo, la llevaron hasta una calle rural donde la mataron de 140 puñaladas y la abandonaron.
Pasados un año y siete meses del asesinato, este pasado sábado, la justicia citó a Olivares para que se presentara el lunes a declarar por la denuncia que había hecho contra su marido por malos tratos, pero la citación llegó tarde, ya que la mujer había sido asesinada en julio de 2012.
Su padre, Federico Olivares, contó que el policía que fue a su casa a llevar la citación "es de la misma Comisaría que investigó el crimen", por el que están presos Palma, Videla y Corvalán, según relata Infojus.
"Yo no me explico cómo pude ser esto", dijo Olivares, quien señaló que en la Defensoría le "dijeron que no sabían que ella había muerto asesinada", lo que consideró "una burla".
En la sede judicial, la secretaria de la Defensoría de Pobres y Ausentes, Natacha García, dijo que "se trató de un error" cometido por ella: "Estuve más de un año fuera de la provincia y no tenía conocimiento de la muerte de Cristina", expuso.
"Citamos a la familia para informarle sobre el cumplimiento de la medida pedida, porque ella había solicitado protección y nosotros notificamos que el trámite se cumplió", dijo la funcionaria, que depende del defensor oficial Mario Vega y que pidió "disculpas a la familia por el mal momento que pasaron".
Olivares era madre de dos niños de 1 y 3 años cuando la encontraron con las manos atadas por atrás del cuerpo y con los pantalones por debajo de las rodillas. Según la autopsia fue asesinada de 140 puñaladas.
Según la causa, el principal imputado por el homicidio, su marido, estuvo en la escena del crimen y fue él quien hizo ir a Cristina hasta ese lugar. La amante, Rosa Videla, fue la que la apuñaló y la amiga de ambos fue cómplice. Los tres están procesados.