Actualizado 08/10/2014 04:28

Fernández de Kirchner promulga el nuevo Código Civil de Argentina

La presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner
Foto: REUTERS

BUENOS AIRES, 8 Oct. (EUROPA PRESS) -

   El Gobierno argentino ha promulgado este martes el nuevo Código Civil y Comercial, votado por el Congreso la semana pasada con el apoyo de 'kirchneristas' y aliados, pero sin el voto de la oposición, que llegó a abandonar el edificio para mostrar su rechazo a la norma, que tachan de "ilegal", según informa el diario argentino Clarín.

   "Este Código no pertenece a ningún partido político, no pertenece a ningún gobierno. Es el Código de la democracia", ha afirmado la presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, en un acto en el Museo del Bicentenario de la Casa Rosada, que ha estado marcado de nuevo por la ausencia de los miembros de la oposición.

   Los dirigentes de la oposición denuncian un "tratamiento exprés" del Código, mientras que la mandataria argentina ha insistido en que no hay antecedentes de un debate "tan abierto" para una ley. En el acto también han participado los jueces de la Corte Suprema de Justicia Ricardo Lorenzetti, Raúl Zaffaroni y Elena Highton Nolasco, además de otros juristas que participaron de la redacción del Código.

   En su discurso, la presidenta ha considerado la promulgación del nuevo Código como un hecho "histórico", un "hito" del periodo 'kirchnerista'. "Se trata del cambio institucional más grande del último siglo y medio", defiende el Gobierno a través de un vídeo promocional que se ha proyectado este martes.

   Los diputados 'kirchneristas' aprobaron el pasado miércoles en la Cámara, con 134 votos a favor, el nuevo Código Civil y Comercial argentino, que se presentó sin modificaciones, tal como fue sancionada en el Senado a finales del pasado mes de noviembre.

CAMBIOS EN LA VIDA DE LOS ARGENTINOS

   Los cambios que introducirá en la vida de los argentinos afectarán, sobre todo, al matrimonio, la adopción y el nacimiento, según detalla el diario argentino 'La Nación', que recuerda que la norma, pese a ser sancionada por el Gobierno, no entrará en vigor hasta el año 2016.

   Algunas voces que se han posicionado en contra de la nueva ley aseguran que el Código Civil ha sufrido las presiones de la Iglesia Católica, algo que los legisladores del Frente para la Victoria desmienten. Sin embargo, algunos sectores consideran revelador que el anuncio se haya dado en el marco de la visita de la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, al Vaticano.

   Asimismo, los opositores defienden que la nueva norma "no cuenta con el dictamen correspondiente de la Comisión", paso "indispensable" para el debate posterior en la Cámara de Diputados. De igual manera, advierten de que el Senado "modificó el texto cuando lo debatió en noviembre" y que éste "caducó cuando se produjo el recambio en ambas cámaras parlamentarias", en diciembre de 2013.

   "La violación de la reglas para sacar adelante el texto 'a los codazos' pone en evidencia la groserías que integran el nuevo código. No se respeta el reglamento porque se oculta la posibilidad de debatir sobre el contenido", ha denunciado la diputada Margarita Stolbizer (Gen-UNEN), que insiste en que el proyecto se ha votado "a los cachetazos".

PRINCIPALES NOVEDADES DEL NUEVO CÓDIGO CIVIL

   Entre las novedades del Código Civil aprobado este miércoles destaca la incorporación de la Ley del Matrimonio Igualitario, aprobada en 2010, por lo que no se realizarán distinciones entre varón y mujer para definir quiénes pueden casarse.

   Además, los cónyuges podrán optar entre dos acuerdos prenupciales: el régimen de sociedad de bienes gananciales --único existente en la actualidad-- y el de separación de bienes. También se prevé una compensación económica en caso de que el divorcio deje a uno de los cónyuges en un "desequilibrio económico manifiesto".

   En lo que respecta al divorcio, se simplifican y agilizan los trámites, por lo que algunos diputados critican que se trate de un divorcio "exprés". Cuando el nuevo código entre en funcionamiento sólo será necesario el deseo de uno de los cónyuges, sin justificar una causa, en cualquier momento de la relación matrimonial --hasta ahora, debían esperar tres años desde la boda--.

   Por otra parte, en el plano económico, establece que si una deuda ha sido contraída en otra moneda que no sea la oficial, se podrá pagar "dando el equivalente en moneda de curso legal, de conformidad con la cotización oficial".