Actualizado 03/07/2015 03:44

Argentina.- El Gobierno argentino rechaza el plan del Grupo Clarín para adecuarse a la Ley de Medios y buscará dividirlo

Cartel contra el grupo mediático Clarín en Buenos Aires
MARCOS BRINDICCI / REUTERS


BUENOS AIRES, 9 Oct. (Reuters/EP) -

El ente regulador de medios de Argentina ha decidido este miércoles que llamará a licitación para redistribuir licencias del Grupo Clarín con el objetivo de adecuarlo a los límites de la ley vigente, tras rechazar por irregularidades un plan de reorganización voluntaria presentado por la compañía.

El país sudamericano aprobó en el 2009 una polémica norma, que apunta a limitar la cantidad de licencias de radio y televisión en manos de una misma compañía y que afecta a Clarín, un grupo con el que Gobierno ha estado enfrentado en los últimos años.

El Grupo Clarín se ha enfrentado enérgicamente a la nueva ley argumentando que viola la libertad de expresión y la propiedad privada.

En una reunión de directorio, la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (Afsca) ha decidido por 5 votos a favor y 2 abstenciones proceder con la adecuación "de oficio" del grupo, según han informado medios locales tras el final de la sesión.

La entidad ahora deberá obtener una tasación del valor de las licencias que están en manos de Clarín y exceden el máximo permitido por la ley, después de lo cual convocará a un concurso para redistribuirlas.

"Está absolutamente claro de que (la propuesta de Clarín) está fuera de la ley", ha dicho el titular de Afsca, Martín Sabbatella, en una conferencia de prensa. "Es el grupo que más lesiona la democratización de la palabra en el sentido de que es el que tiene la posición dominante", ha apostillado.

El mayor grupo de medios de Argentina había presentado un plan para dividirse en seis unidades de negocios y así adecuarse a la regulación, pero el Gobierno insiste en que ha encontrado "anomalías" entre los integrantes de esas firmas que incumplirían con lo establecido en la normativa.

Clarín, un fuerte crítico de la gestión de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, controla el principal operador de televisión por cable del país, el diario de mayor tirada, las radios más escuchadas y dos de los canales de televisión con mayor audiencia, entre otros activos.

Tras el anuncio de Sabbatella, Clarín ha publicado un comunicado que fue reproducido por los medios locales en el que asegura que el Gobierno intenta "perseguir a los medios críticos y apropiarse de los que aún no pudo controlar".

"El Grupo Clarín recurrirá a todas las instancias que correspondan para resguardar sus derechos y el cumplimiento del plan de adecuación aprobado, que se ajusta estrictamente a la ley de servicios de comunicación audiovisual", añade la compañía.

La propuesta de división voluntaria de Clarín había llegado tras una caliente batalla legal que se extendió por cuatro años y que finalizó en octubre del 2013, cuando la Corte Suprema del país austral declaró que la norma no viola la Constitución Nacional.

Clarín, junto con otros medios opositores al Gobierno, cuestionaron la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual con el argumento de que busca acallar voces contrarias a la presidenta Fernández, quien defendió la norma como una forma de democratizar los medios y combatir su concentración.