Actualizado 01/07/2015 20:39

Derrumbe de precio de soja golpeará a agricultores de Argentina y finanzas del Gobierno

* Banco Central necesita ingreso de divisas para sostener economía

* Precios locales se hundieron desde julio en línea con Chicago

* Productores guardan soja por 9.700 mln dlr como cobertura

Por Maximiliano Rizzi

BUENOS AIRES, 24 oct, 24 Oct. (Reuters/EP) -

- El derrumbe de los precios de soja causaría pérdidas por hasta 2.700 millones de dólares este año en el sector agrícola de Argentina, lo que presionará aún más las ajustadas reservas internacionales que el país usa para pagar deuda y mantener la economía en funcionamiento.

Argentina es el mayor exportador mundial de aceite y harina de soja y el tercero del poroto, cuyas ventas representan una de las principales fuentes de divisas para el país, donde las firmas exportadoras deben liquidar sus dólares a través del Banco Central.

Desde hace meses, los productores del país austral están vendiendo a cuentagotas sus granos del ciclo 2013/14 para protegerse de las turbulencias locales, en medio de una altísima inflación y ante una posible nueva devaluación de la moneda.

"El ritmo de ventas de granos durante esta campaña es el más bajo en años", dijo a Reuters Natalia Colombo, economista de la corredora de granos BLD, una de las más importantes de Rosario, donde se ubica la mayor plaza agrícola del país.

Los agricultores de Argentina terminaron de recolectar en julio una cosecha récord de 53,4 millones de toneladas, pero -al igual en los últimos años- muchos prefieren quedarse con sus granos antes que venderlos por pesos cuyo valor es corroído por una inflación que algunos analistas privados estiman cercana al 40 por ciento anual.

Ante este panorama, el Gobierno está presionando a los agricultores para que vendan unos 23 millones de toneladas de la oleaginosa del ciclo 13/14 que el Ministerio de Agricultura calcula que siguen en su poder, con el fin de incrementar las reservas del Banco Central.

De acuerdo con el precio oficial de exportación en Argentina -que cayó cerca de un 20 por ciento desde julio- los agricultores tienen acopiada soja por unos 9.700 millones de dólares, por debajo de los 12.400 millones en que estaban valuados los 23 millones de toneladas al inicio de julio.

Los futuros de la soja en el mercado de Chicago cayeron casi un 35 por ciento desde mediados de año, arrastrando también a los precios locales, lo que empujó a los productores argentinos a limitar aún más sus ventas.

Pero dado que el derrumbe responde a las previsiones de una enorme cosecha récord de soja en Estados Unidos, no se espera que los precios se recuperen pronto.

En 2015 "los precios continuarán con una tendencia baja, lo que se combinará con una brecha cambiaria y mayores costos, impactando en la rentabilidad del productor", afirmó la consultora Abeceb.com en un informe de proyecciones sectoriales.

La situación pondrá más presión sobre las reservas internacionales, que actualmente rondan los 27.000 millones de dólares y que el Gobierno usa para pagar vencimientos de deuda e importaciones y controlar la volatilidad en la plaza cambiaria, donde el Banco Central interviene diariamente.

Luego de mantener conversaciones con el Gobierno, la cámara de exportadores de granos y derivados, CIARA-CEC, estimó el miércoles que liquidará 5.700 millones de dólares en el último trimestre del año, muy por encima de los 4.000 millones registrados en igual período del 2013.

No obstante, ello dependerá de un repunte del nivel de ventas de soja por parte de los agricultores argentinos.

VENDER O NO VENDER

Los agricultores argentinos están vendiendo el mínimo indispensable de sus reservas del grano para pagar impuestos, costos operativos y préstamos bancarios, que se han encarecido desde que el país cayó en un nuevo default en julio.

"Los productores que no han vendido hasta ahora han equivocado el camino porque de hecho hay una pérdida en divisas muy importante para el país", dijo la semana pasada a una radio local el ministro de Agricultura, Carlos Casamiquela.

Desde comienzos de año hasta el 17 de octubre, los exportadores de granos y derivados liquidaron divisas por 19.492 millones de dólares, cerca de un 4 por ciento menos que el monto registrado en el mismo período del 2013, según CIARA-CEC.

Si bien la caída de los precios locales hasta el momento fue de menor magnitud que en Chicago, la plaza estadounidense es muy influyente sobre el mercado argentino de granos y las previsiones para los próximos meses siguen siendo sombrías.

"En el mercado de Chicago los precios esperados para fin de año y 2015 se encuentran cerca de los 350 dólares por tonelada, un 32 por ciento por debajo del precio promedio observado en el período 2011/2013", señaló un reporte de coyuntura de la Fundación Mediterránea.

NÚMEROS QUE NO CIERRAN

En ese contexto, y ante una fuerte presión devaluatoria sobre el peso argentino, la economista Colombo prevé que los agricultores seguirán aferrándose en la mayor medida posible a sus granos, a la espera de una devaluación de la moneda local que compense la caída de la rentabilidad.

"El productor espera la devaluación, ya que a estos niveles de precios los números no le cierran", añadió.

El ministro de Economía, Axel Kicillof, llamó el jueves a los productores a apurarse a vender sus granos antes de que caigan más los precios internacionales, a la vez que afirmó que no habrá una nueva devaluación.

"Aclaramos que a lo largo del año va a haber estabilidad cambiaria, con lo cual guardar la cosecha para especular con movimientos cambiarios es un error", señaló el funcionario en declaraciones a una radio local.

Esta desafortunada combinación de factores amenaza la rentabilidad del sector para la temporada de soja 2014/15, cuya siembra acaba de comenzar.

"Hoy lo que está sucediendo es que a rindes promedio nacionales, con el aumento de costos internos, no tenés rentabilidad", dijo Ernesto Ambrosetti, economista jefe de la Sociedad Rural Argentina, que representa a agricultores locales.