Actualizado 23/04/2008 18:57

España/Argentina.- El Rey ensalza la "fuerza, sinceridad y espontaneidad" del lenguaje de Juan Gelman

El ministro de Cultura le define como un "cincelador de la palabra" que ha optado por "aprender a resistir"


ALCALÁ DE HENARES (MADRID), 23 Abr. (EUROPA PRESS) -

El Rey don Juan Carlos, que hizo entrega hoy al poeta argentino Juan Gelman del Premio Cervantes 2007, ensalzó la "fuerza, sinceridad y espontaneidad" de su lenguaje al tiempo que recordó su vida "dramáticamente marcada por las muy crueles consecuencias personales y familiares de la dictadura".

El monarca, que inició su discurso celebrando que la lengua española sea "uno de los mayores tesoros que compartimos", definió a Gelman como "uno de los más valiosos poetas de los últimos tiempos" y dijo que el Premio Cervantes reconoce así "la obra de un gran escritor argentino, enamorado de la palabra y firmemente convencido de su inagotable potencial de comunicación, así como de su vigor incomparable para luchar contra la adversidad". En este sentido, recordó también "su compromiso a favor de la dignidad humana, así como en defensa de los derechos humanos, de la verdad y de la justicia".

Asimismo, don Juan Carlos aludió a su capacidad como "renovador del idioma y creativo del lenguaje", "con un discurso poético centrado en lo real". "Su innato don de la expresión, junto a la singularidad de su estilo, permiten que en sus trabajos la palabra destile un ímpetu sincero y espontáneo, capaz de realzar, a un tiempo, el valor de la poesía como arte y como lenguaje del corazón", continuó el Rey.

POESÍA COMPROMETIDA.

Asimismo, el monarca afirmó que la poesía de Juan Gelman "destila compromiso personal, social y creativo" y que su obra "transmite su particular forma de mirar la vida y de ver el mundo, a través de temas recurrentes como el amor, la memoria, el dolor y la muerte".

Para Gelman, "la palabra ha representado el reencuentro, en el exilio, con su patria y con sus raíces más profundas", añadió el Rey.

"No en vano ha definido la poesía como "el territorio más libre del mundo", apostilló.

Por lo que se refiere a su relación con España, don Juan Carlos recordó que "ha permanecido siempre viva, gracias a la impronta que han dejado en su obra autores como Garcilaso, Quevedo, Cervantes, Machado o Lorca, y al continuado contacto con un país que fue, hace más de treinta años, escala de acogida en su doloroso exilio", sin olvidar tampoco en él las huellas de San Juan de la Cruz y de la poesía mística del Siglo de Oro.

Don Juan Carlos también puso de manifiesto cómo su etapa más reciente "trasluce el dolor por los amigos desaparecidos y por su alejamiento de la tierra que le vio nacer". "Su capacidad para hablar directamente con nuestras soledades y sufrimientos, ha logrado que nuestro idioma se estremezca y que resuene una voz que expresa lo que tantas veces falta", dijo.

"APRENDER A RESISTIR".

Por su parte, el ministro de Cultura, César Antonio Molina, definió al homenajeado como "un cincelador de la palabra", que ha optado por "aprender a resistir". "He afirmado en alguna ocasión que Juan Gelman lleva la poesía tatuada en los huesos", afirmó el ministro, sobre un artista "adicto a su profesión de poeta".

"Detrás de su canto a la vida y de su coraje frente a los problemas de la humanidad, nos devuelve la esperanza de que siempre existirá una nueva utopía preparada para entrar en escena al desplomarse la que le precedió", afirmó Molina, quien consideró que Gelman enlaza con pensadores como San Juan de la Cruz o Santa Teresa "para indagar, en torno a la naturaleza de la luz espiritual, su dolorosa paradoja y el misterio del amor".

Molina, quien consideró que su obra ofrece "un paralelismo a través de los siglos con la de Miguel de Cervantes y simboliza la resistencia frente a la adversidad y el triunfo de la imaginación como arma y refugio frente al infortunio", agregó que para Gelman "la poesía se ha constituido en un punto firme de apoyo, en un salvavidas para una vida repleta de noches oscuras del alma y de momentos de indudable dureza y dolor".

El ministro dijo que el poeta argentino, al igual que Nicanor Parra, Mario Benedetti o Antonio Cisneros, representa a la poesía hispanoamericana que inició "su transformación radical" mediante voces que transmiten, "con un lenguaje cotidiano y novedoso: rabia, indignación y frustración, pero también ternura, cercanía, ironía e incluso humor".

RITMO Y BELLEZA.

Según Molina, "biografía y poesía se confunden" en la obra de "sensaciones, ritmo y belleza" de Gelman. Versos que "conmueven y estremecen" y que, dijo, "surgen libres, espontáneos, como si obedecieran a una fuerza superior, a un dictado ajeno y perentorio, a un deber inexcusable".

También recordó su faceta como ensayista y periodista "incisivo, original y valiente" y tras repasar algunas de las obras del Premio Cervantes 2007, agregó que Gelman entiende la poesía como "un ejercicio de coraje triste y a la vez como una indagación y como una creación verbal". "Su lenguaje es siempre original y, desde su lucha incansable, guarda la posibilidad de construirse y construirnos, porque su palabra ha aprendido, dolorosamente, que el consuelo es también sabiduría", concluyó.