BARCELONA, 26 feb, 26 Feb. (Reuters/EP) -
- El mediocampista Xavi dijo el miércoles que el Barcelona no se puede permitir más tropiezos y le pidió a sus compañeros que se mantengan positivos, pese a una serie de malos resultados, mientras que defendió al entrenador argentino Gerardo Martino.
El campeón defensor cedió la primera posición de la liga española al Real Madrid el fin de semana tras una sorprendente derrota 3-1 ante la Real Sociedad, quedando a tres puntos de su clásico rival y empatado en 60 puntos con el Atlético de Madrid a falta de 13 partidos para el final de la temporada.
El Barça enfrentará al Real Madrid en la final de la Copa del Rey en abril y está en buena posición para asegurar una plaza en los cuartos de final de la Liga de Campeones después de ganar 2-0 al Manchester City en la ida de los octavos.
"Todo está en juego y tenemos que ser positivos", dijo el capitán Xavi en una rueda de prensa después del entrenamiento.
"Sabemos que es la hora de la verdad, no se puede fallar más", destacó el internacional de 34 años.
Xavi dejó en claro que la derrota liguera golpeó duro en el vestuario.
"Debido al sábado, estamos enfadados con nosotros mismos. Pero los tres somos candidatos (en la Liga) y el Barça es el vigente campeón", explicó.
"Estamos en una posición óptima para conseguir la Liga, los tres títulos. Está todo intacto, vamos a ser optimistas, al menos desde dentro", agregó.
El Barça recibe el domingo al recién ascendido Almería y Xavi dijo que es una buena oportunidad para volver a las victorias después del tropiezo de la semana pasada en San Sebastián.
También defendió al entrenador argentino Gerardo Martino, que admitió cometer errores tácticos en el partido de la Real y dijo que su decisión de dejar descansar a jugadores clave, incluido Xavi, había sido un error.
"Cuando se pierde se buscan culpables, esta vez se ha hecho con el entrenador y no es justo. Nos equivocamos todos", dijo Xavi. "Hay días que el contrario está mejor, que tú no estás fino. Es fútbol".
Martino, en su primera temporada al cargo del equipo después de la marcha de Tito Vilanova, no podrá estar en el banquillo el domingo tras su expulsión durante el descanso del partido contra la Real por insultar a uno de los miembros del cuerpo técnico del equipo vasco.