MADRID, 30 Oct. (Notimérica) -
Un menor de 10 años ha pasado este martes a llamarse Facha en el Registro Central Civil de Buenos Aires, Argentina, que reconoce así la identidad de género del niño que nació como mujer pero se autopercibió como hombre desde muy pequeño.
"La cigüeña se equivocó, soy un nene", esas son las palabras en las que el niño expresó a sus padres lo que sentía, según publica 'Télam'.
"Fue la vez que lo puso en palabras. Lo acompañamos en este paso porque sabemos cómo sufría" ha relatado su madre, Bárbara.
La corta edad de Facha no le ha impedido alcanzar este reconocimiento jurídico, ya que la ley de identidad de género en Argentina incluye a los menores de 18 años como sujetos plenos de derecho.
La directora del Registro Civil, Ana Labaqué, ha explicado por qué se decidió que el consentimiento del menor era suficiente pese a su corta edad. "A los 10 años, como es el caso de Facha, un niño sabe en qué estado sufre y en que estado pretende ser feliz".
Además Lavaqué ha calificado el trámite administrativo como "un acto de justicia" y ha defendido que "un niño necesita el acompañamiento de la sociedad para vivir en paz, con su identidad, tal como él decide que sea".
Facha es aficionado al fútbol y sueña con salir al campo de la mano de un jugador de los Boca Juniors como los otros niños. Ha tenido suerte porque ha contado con el apoyo de su familia, de su escuela y de numerosas organizaciones y asociaciones como INADI, 'Fulanas' o la Red Intersexual, Transgénero y Transexual de Argentina (RITTA).
No fue el caso de la niña argentina Lulú, el pasado año, que generó mucha controversia en el país y que necesitó una defensa feroz por parte de estas organizaciones y el respaldo político para no acabar en los tribunales. Sin embargo, la odisea de Lulú ha servido para sentar precedente en el país y ha hecho posible que niños como Facha sigan sus pasos.
María Rachid, diputada porteña y fundadora de la Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans (FALGBT) ha expresado su satisfacción por la inclusión de los menores dentro de la Ley de Identidad de Género.
Asimismo, ha defendido que a "10 años las personas trans se autoperciben y a esa edad es cuando comienzan los problemas con la familia, con la escuela y muchos terminan en la calle sin otro destino que la prostitución".
"Si podemos a una edad temprana cambiar los datos registrales para que estos reflejen su propia identidad estaremos ayudando para que ellos tengan una vida plena" ha añadido.
El de Facha es el primer caso de cambio de género en menores de la ciudad de Buenos Aires y el primero sin controversia social en Argentina.